Luna de abríl, cálida y radiante miras serena,
a este infame hombre que sin merecerlo, te escribe este poema,
cuanto daría por alcanzarte, mi vida entera si pidieras,
tan solo por poder tocarte, alma y corazón diera,
tu reflejo en el océano me recuerda lo lejos que estas,
el llanto en mis ojos que nunca te tendré, solo queda observarte y llorar,
llorar de alegría por que te amo y por mas que el tiempo pase,
los recuerdos se borren, la vida termine, seguiré amándote,
amando en la lejanía y abrazando la distancia,
en una cálida noche de abril, solo queda tu fragancia.
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Ese sueño que aunque no podemos cumplir nos mantiene vivos.
S.F
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Lágrimas de Fénix.
PoesíaCada letra escrita es una lagrima derramada, un espejismo difumina la nitidez de mi alma.
