Unos idiotas como vecinos [PAUSADA]

8- Sorpresa!!

Hola hermosuras, como cada semana aquí va otro capitulo de Unos idiotas como vecinos, como iréis viendo al cabo de los capítulos, en ellos irán apareciendo cosas mas interesantes y espero que eso haga que os den mas ganas de leer esta historia, también quería agradecer a la gente que lee cada semana mis capítulos, agradecerle a alas19 que es quien me da algunas ideas sin ella darse cuenta, siempre que hablamos hay algo que me interesa y descubro que es perfecto para novela, entonces tengo que darle un millón de gracias a ella por hacer que esta novela exista.

Busco entre la letra A algún grupo que me guste mucho y que me apetezca, y entre ellos encuentro uno que es genial, cuando el disco empieza a sonar la casa retumba con cada golpe de batería que se escucha y al fijarme mas en la casa, me doy cuenta de que en todo el comedor hay altavoces repartidos, eso hace que el sonido de la música de escuche mucho mas fuerte.

Abby: Eso es música-. dice mientras baila y guarda las cosas en los armarios.

Nora

Cuando llegó Kate, nosotras habíamos terminado de organizar todas las cosas mientras las canciones pasaban, le comentamos a Kate lo de ir a darles la bienvenida a los nuevos vecinos.

Estábamos en la puerta y Abby llamó al timbre, a lo que después escuchamos una voz grave, pero no se le entendió nada.

Jennifer: Por favor que no sea un viejo-. Dijo esta con los ojos cerrados y los dedos cruzados.

Kate: Jennifer, tranquila, solo son los vecinos, no te va a salir un puto viejo pederasta que se come a sus víctimas después de destrozarlas-. A esta se le puso la cara blanca.- Por favor que no sea un pederasta-. Dijo haciendo lo mismo que Jennifer.

La puerta se abrió y todas, prácticamente nos quedamos muertas.

Abby: Pues no es un viejo pederasta-. Dijo esta mirándolo de arriba a bajo.- Para nada, es mucho mejor.

Hay mi madre, yo no podía hablar, estaba prácticamente en trance, no quitaba mis ojos de sus facciones, todas perfectas, rectas, ojos oscuros, como su pelo, guapísimo, era el chico perfecto, era un dios griego, y vive al lado de nuestro piso, voy a poder disfrutar de el todos los días, sin pensar mal, pero igual teniendo fantasías, y encima sin camiseta, gracias dios por traerme a mi futuro marido, padre de mis hermosos hijos que serán los mas hermosos del universos.

Kate: Que haces aquí?-. Dijo esta al chico sin camiseta.

Abby: Lo conoces?-. Dijo la otra confundida.

Kate: Claro, es mi hermano.

Yo: Alex!?-. vale esto debe ser una broma, donde esta la cámara oculta.

Jennifer: Alex!!-. Y se tiro encima de el, literalmente encima de el.

Alex: Hola preciosa-. Dijo este abrazándola por la cintura a pegándola mas a su cuerpo, claro, si eso es posible.

Kate: Hola, seguimos aquí, tierra llamando a mi hermano y mi amiga.

Las dos lapas se soltaron, estaban los dos con la cara roja, y yo se por que, Alex no llevaba camisa y parecía que se acababa de duchar, y por lo visto l, le ha mojado toda la camisa a Jennifer, y se le transparentaba un poco el sujetador rosa.

Akex: Perdón-. Dijo este colorado como un tomate.

Jennifer: No pasa nada, voy a cambiarme-. I salió volando a casa a cambiarse de camiseta.

Kate: Vale, di me que haces aquí.

Alex: Bueno, pues este es el piso que he alquilado con unos amigos.

Kate: Me estas diciendo que vamos a ser vecinos!?

Alex: Si. Y del chico que has conocido en el supermercado y de otros tres mas--. Dice este sonriendo.

Kate: Me estas jodiendo!?-. Dijo esta roja de furia.

Alex: Hermanita esa boca, no se dicen malas palabras.

Kate: Y una mierda, tu no te puedes mudar aquí, así que vete haciendo de nuevo las maletas y buscate otro sitio.

Yo: Kate, relajate, no puedes obligar a tu hermano a mudarse a otro lado, deja que se quede aqui, no van a molestar.

Abby: Tranquila Kate, seguro que no molestan, tu hermano es buena persona.

Alex: Gracias Abbigail.

Abby: Vuelve a llamarme así y te quedas sin bolas-. Dijo esta con cara de perro.

Alex: Bueno, yo mejor me voy, tengo que ir arreglando cosas para cuando lleguen los demás.

Kate: Pues adiós-. Dijo esta a la vez que se iba a llamar a Jennifer.

Yo: No le hagas caso, es demasiado cabezona, se le pasara el mosqueo, o que tenga en este momento en su cabezota.

Alex: Pero no me gusta verla así, es mi hermanita.

Abby: Pero ahora tienes que dejar que se tranquilice y que piense, sabes que desde pequeña lo que ella a deseado es poder ir a vivir sola sin padres por el medio y en tranquilidad, aunque con nosotras tranquilidad no va a tener, pero ahora tienes que dejar que se relaje.

Alex: Bueno, espero que me perdone, no sabía que se venia a vivir aquí con vosotras, nunca me dijo el lugar ni a mi ni a mis padres, el lugar lo eligió mi amigo Ethan.

Yo: Ella no tiene nada que personar, ella en verdad no se puede enfadar contigo, eres demasiado importante para ella, has sido la única persona que ha estado con ella desde siempre.

Alex: Pero por si acaso, explicarle que yo no he tenido nada que ver con que ahora seamos vecinos y que la quiero.

Abby: Tranquilo, se lo diremos. Y a todo esto, deberías lanzarte.

Alex: Lanzarme? A que?

Yo: No a que, si no a quien.

Alex: No entiendo-. dijo este arrugando su frente.

Abby: Oh vamos, no puedes ser tan tonto, sigues enamorado de Jennifer.

Alex: Que?-. Dijo este con los ojos como platos.

Yo: Tranquilo, nosotras guardamos tu secreto, pero deberías hablar con ella, porque ella tambien te quiere todavía.

Alex: No creo que me vaya a perdonar por lo ocurrido-. Dijo este con cara triste.

Abby: Tu no tuviste la culpa de que tus padres se interpusieran en vuestra relación solo porque mi prima quiera ser profesora de guardería y tus padres quisieran para ti una chica que estudiara derecho, tu debes elegir a la persona que vas a tener a tu lado siempre.

Alex: Gracias chicas, echaba de menos vuestro consejos-. Dijo este abrazado-nos.

[...]

Después de nuestra conversacional y consejos hacia Alex para volver con Jennifer, las cuatro nos fuimos a buscar el coche de Kate.

Cuando por fin Kate se acordó de donde narices había metido su coche pudimos ponernos en marcha, bueno ella puso en marcha el coche para llevarnos a no se donde. A los diez minutos de camino, vimos como paraba en la puerta del starbucks, como nos conoce.

Kate aparcó el coche y todas bajamos de este como luciérnagas hacia la luz, al entrar, Kate, fue a pedir lo que tanto nos gusta a cada una., mientras, las demás nos fuimos a sentar en una mesa que había con sillones rojos blandos y una mesa de madera.