Ésta es una novela sobre el maltrato de genero, tiene mucha violencia, si eres muy sensible abstente de leerla o lee bajo tú responsabilidad.
Esta historia es un compendio de anécdotas y casos de muchas mujeres algunas que conozco de primera mano y...
Desperté bastante cansada, los párpados me pesan y mi cuerpo duele. Me siento vacía, ya extraño sentir a Dasha dentro de mí. Intente levantarme de la cama pero el dolor en mi zona intima no me dejó.
—buenas tardes jazmín— dijo la doctora.
Cuanto tiempo estuve inconciente? ¿Qué hora es?
—buenas tardes .....— dije con voz ronca, aclaré mi garganta—¿Qué hora es ?¿Donde esta mi bebé?
—vamos a bañar a la bebé, Son las 2:00 pm— dijo Maggie dando me una cálida sonrisa.
— yo lo quiero hacer. Quiero verla— dije emocionada.
—no puedes, estas débil —dijo cariñosa
—Quiero hacerlo, por favor— supliqué
—esta bien—dijo resignada
Me ayudaron a bajar y me sentaron en una silla de ruedas, me llevaron al baño y ya estaba todo listo para bañarla, pero ella no estaba, fruncí el ceño.
— ya la doctora la trae— dijo margui, en efecto la doctora atravesó el umbral con mi pequeña en brazos.
Las lágrimas de felicidad se deslizaron por mis mejillas.
La doctora me la dio y la sostuve un rato, luego me la quitó para empezar a bañarla.
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Su cabello es negro como el mio, su piel delicada y suave, su boquita Rosada y sus labios delgados, es simplemente hermosa.
—¿Donde está Jaiden?—pregunté.
La doctora se había salido del baño.
—se fue enojado cuando comprobó que era una niña—Dijo margui
Suspiré resignada, él no la amara.
— cuanto tiempo estuve dormida?
—desde las 3:00 pm de ayer, hora en que nació la niña.
—yo la quiero vestir.
— no creo que sea conveniente, más bien yo la visto mientras a ti te bañan y comes— dijo saliendo de la estancia.
Pero....es mi bebé.
La otra empleada puso la tina a llenar mientras me cepillaba los dientes y para luego despojarme del vestido sucio de sangre.
Soltó la trenza de mi cabello y me ayudó a ponerme de pie. Ingresé con cuidado a la tina y ella comenzó a bañarme, lavó mi cabello y Restrego cada zona de mi cuerpo.
Salí, me secó y me vistió con un vestido blanco de tela suave y al panty le colocó una toalla materna para luego colocarme lo. Me entregaron la bandeja con el almuerzo, comencé a comer, esta vez sí sabe a algo, comí de prisa. Dejé la bandeja sobre la mesita de noche, me baje de la cama con cuidado, Caminé despacio y un poco encorvada a la habitación de mi niña. Ella está llorando mucho.
