Final;

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Hoy conocí un chico en el puesto de helados... Sentí algo en mi estómago cuando me sonrió y por un momento creí que era por el helado; lo sé, todo un idiota. Estuve hablando con él y tenemos muchas cosas en común; quería decirle sobre éstas cartas pero tenía miedo de que me juzgara y preferí callarme.
Bueno te dejo; que mi helado ya se derrite.








Unos toques en la puerta lo hicieron brincar, últimamente se asustaba con cualquier cosa; volteó y ahí parada se encontraba su madre con una sonrisa en el rostro.

—Me estas dando miedo —le dijo mirándola con miedo.

—Abajo se encuentra un chico hermoso preguntando por ti —contestó recargándose en el marco de la puerta.

—¿A mi? —preguntó confuso; ella solo asintió con la cabeza —¿Cómo se llama?

—Alan... —la boca del castaño se abrió en una perfecta ‘o’ al igual que sus ojos.

Su madre soltó una carcajada al ver como su hijo bajaba las escaleras desesperado.

liam ;; cartas a la comidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora