25.Donotopemme.exe

19 2 0
                                    

Viene por mí. Lo sé. No puedo evitar pensar en lo que me hará cuando llegue. Lo siento cada vez más cerca. Está frente a la puerta de mi casa. No tarda en entrar a mi cuarto. Espero que nadie cometa el mismo error que yo. Lo puedo ver por el espejo. Adiós.

Todo comenzó por una USB. Hacía ya mucho tiempo que había querido una. Anteriormente había tenido una Kingston negra de 4 gb, la cual fue robada. Antes de esa, tenía una Kingston algo vieja y gris, de tan solo 525 mb. Debido a mis deberes escolares, me vi en la necesidad de ahorrar para una nueva. Como es común, semanalmente mis padres me dan $100, los cuales tengo que distribuir entre salidas y comidas de toda la semana, por lo cual me quedaba poco dinero para guardar y tardaría mucho tiempo.

Una tarde, mientras caminaba por el parque con mis amigos, estábamos hablando de ese tema. Algunos me decían que no me preocupara, que con algo de tiempo conseguiría el dinero. Otros cuantos me ofrecían prestarme el dinero y que luego se los pagara.

Unos últimos me intentaban convencer de que no era completamente necesario, que simplemente me mandara los trabajos a mí mismo por correo y listo. Yo iba con la cabeza abajo, ya que me estaban haciendo divagar con tantas ideas que no lo soportaba; entonces vi un destello por el camino junto al bebedero. Me regrese discretamente con la excusa de que debía de tomar agua y me agaché para atarme los cordones.

Una vez abajo, pude reconocer el objeto brillante. Era una memoria USB de dos gb. La recogí sin decir nada (porque entre nosotros se aplica la ley de "si lo encuentras y anuncias, se te quita y se deja ahí") y me la guardé en la bolsa del pantalón.

Cuando llegué a mi casa, lo primero que quise hacer era checar el contenido de la USB, así que tomé la laptop y me encerré en mi cuarto, excusándome con la clásica de "voy a hacer tarea, así que no me molesten". Cuando conecté la USB, todo parecía normal. La USB se llamaba "MY FILES" y se abrieron normalmente las opciones de Windows. Cuando revisé las carpetas, había una o dos con imágenes pornográficas (no se me hizo nada extraño), unos programas portátiles y un archivo .exe. Este último archivo estaba titulado comoDonotopenme.exe, y no se me hizo raro, ya que pensé que eran vídeos pornográficos o cosas así.

Cuando ejecuté el programa, me salió una advertencia rara de Windows, como cuando sale que el programa no se puede ejecutar, pero parecía en otro idioma que no había visto antes. Tenía solo 2 botones con garabatos: uno terminaba en tres puntos y otro en un signo de exclamación. Deduje que el de los tres puntos significaba continuar, así que le di clic. Fue el peor error de toda mi vida.

El programa comenzó. Era un juego estilo Final Fantasy combinado con Dragon Ball Z (osea, de peleas), solo que en flash y tenía gráficas peores que las del mismo juego para Nintendo DS. No le di importancia y seguí jugando, ya que pensé que algo debía de tener de interesante.

En la pantalla de elegir personaje, había personajes que no había visto en ningún juego. Había unos con una apariencia bastante fuerte, unos que se veían débiles y uno que estaba en sombras. A pesar de las sombras, se distinguían 2 cuernos de su cabeza y no lo podía escoger, así que escogí al que mejor se veía. Cuando elegí mi personaje, encontré una advertencia que estaba en español esta vez, y decía:

"Tienes 3 oportunidades. Si fallas, tu vida estará en peligro y nada podrá salvarte."

Cuando leí este mensaje, intenté salir del juego inmediatamente, aunque no pude ni iniciando el administrador de tareas. Entonces me di cuenta de que la única manera de cerrarlo era terminar el juego. Decidí aceptar y, para mi sorpresa, mi oponente era el personaje de las sombras. Tenía un aspecto parecido al de un dragón, solo que caminando como humano. Era tan horripilante que con solo verlo te dan náuseas. Era una pelea que gané 3 de 5 caídas.

Comencé a atacar al monstruo, el cual parecía estar congelado. Yo pensé, "Pan comido. No hay razón para asustarse si no va a hacer más que quedarse parado". Acto seguido, le gané el primer asalto. Cuando comenzó el segundo, algo había cambiado. No podía decirlo bien, pero parecía que mi oponente se había fortalecido y que mi personaje se había desgastado un poco. No le di importancia y comencé a golpearlo, pero el juego estaba más lento; al menos, eso pensé hasta que vi que el enemigo se movía con normalidad. Pensé que esto se debía al desgaste de la batalla anterior, pero misteriosamente yo también me sentí agotado. No me importó y seguí peleando. Gané con dificultad.

Cuando comenzó la tercera ronda, el cambio era más notorio. Mi personaje se veía viejo y el enemigo mucho más poderoso. Cuando el combate comenzó, yo me movía en cámara más lenta que la anterior y no me pude defender de un solo ataque del enemigo. De dos o tres ataques mi personaje ya estaba muerto, y apareció otro mensaje que decía: "Solo 2 vidas más".


Esto me espantó, pero pensé: "Ah de ser para el Game Over, así que no importa".

En la siguiente ronda, mi personaje tenía los huesos casi marcados y se movía más lento que como si estuviera tratando de correr en agua. Parecía que, mientras yo me debilitaba, mi enemigo se fortalecía cada vez más. De 2 golpes fui derrotado y me apareció un mensaje que decía: "Última Vida".

Cuando la última ronda comenzó, mi personaje parecía no tener vida. Había recuperado su fortaleza (eso pensé), pero sus ojos se veían blancos y sin vida. El enemigo, en cambio, tenía ojos súper-realistas, como si fueran ojos de serpiente reales. El fondo también cambió. Antes, era un dojo con nada fuera de lo común. En esta ronda parecía como una pared llena de sangre. Parecía que tenía arañazos que decían: "NO PIERDAS" y "¡NO TERMINES COMO NOSOTROS!".

Entre los contrastes de sangre, se divisaban líneas que no pude ver al principio. Mi personaje se regresó a mover normalmente y con gran resistencia. El enemigo parecía completamente real, como si estuviera fuera de la pantalla.

No se defendía de ningún golpe, parecía que solo hablaba. Poco a poco me fui dando cuenta de que, con cada golpe que le metía, las líneas del fondo se comenzaban a clarificar más y más, hasta que tomaron la forma de cerebros y corazones humanos. Me quedé sin palabras.

Cuando le iba a poner el último golpe, la pantalla explotó, como si todo el daño que le hubiera hecho se revirtiera contra mí en forma de explosión. Al instante, mi personaje murió, pero hubo algo diferente en la secuencia de muerte. En lugar de solo quedar tirado con sangre a mi alrededor, el enemigo se me acercó y, con un solo golpe, mi cuerpo salió volando hacia fuera de la pantalla, con la excepción del cerebro y del corazón. Me quedé en shock.

Después de esto, salió un cuadro de texto en el cual decía: "Te quedan 3 días de vida. No importa donde estés, te encontraré y te mataré".

Acción seguida, la pantalla se cerró y se reinició la laptop. Yo seguía sin decir nada y shockeado. Cuando se volvió a abrir, el archivo estaba dañado, como si solo se pudiera abrir una vez.

Eso fue un viernes, y el lunes siguiente no teníamos clases. Yo decidí no darle importancia y seguir con mi vida normalmente. Todo iba bien, hasta que noté que me sentía seguido y mirado a todas horas. Pensé que solo era paranoia, que nada de eso pasaría. El domingo mi paranoia había aumentado al grado de ver y oír cosas. No podía creerlo, así que me encerré hasta las 2 A.M en mi cuarto. Entonces comencé a oír pasos, pasos que no podían ser oídos por mis padres ni mi hermana. Pasos que significaban mi muerte. Pasos fríos y sin vida. Pasos que solo yo podía escuchar. Comencé a escribir:

-Si alguien encuentra esto, le pido que por nada del mundo abra el archivo .exe. Los recordaré desde el fondo del juego.

CreepypastasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora