In the rain【MariChat】(Act. lentas)

✦ Prólogo✧

Marinette ingresaba al aula junto con su amiga Alya, y al dirigir la vista hacia donde se sentaba pudo ver como un chico rubio con camisa blanca, jeans azules y zapatillas naranjas estaba agachado colocando algo en su asiento-o al menos eso fue lo que esta pensó al verlo ahí- entonces enojada se acercó y le preguntó:

—Hey, ¿Qué diablos estás haciendo?

El chico pega un salto y la mira nervioso mientras balbucea, su mirada dirigiéndose hacia la verdadera culpable de todo: Chloé Bourgeois. Marinette también la ve; la típica rubia de ojos celestes quién se reía a carcajadas encontrando todo gracioso. La azabache rápidamente se da cuenta de todo: el chico rubio estaba con Chloé.

—Está bien, lo entendí—dijo con el ceño fruncido—. Buen trabajo ustedes tres, es muy divertido—Marinette sentía impotencia y rabia, no solo del chico (Que para decirse bien esta ni conocía, así que no entendía porque estaba en su contra), odiaba también a Chloé quien siempre le quiere hacer la contra.

Adrien rápidamente se da cuenta del malentendido y se apresura a tratar de explicar todo:

—No, no, ¡Yo estaba tratando de sacar el chicle!—explicó exasperado.

—¿Ah si?—lo miró mal y luego se acercó a su asiento para quitar el chicle, primero lo miró asqueada para después poner un papel encima que había sacado de su mochila—. Tu eres amigo de Chloé, ¿verdad?—se giró a verlo.

—¿Por qué todo el mundo me dice eso?—murmuró disgustado.

A cada momento Adrien la volteaba a ver, pero ella solamente lo ignoraba. 

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Luego de la lucha con StoneHeart todo se solucionó...Menos las cosas con Marinette y Adrien; al día siguiente el rubio intentó saludarla pero la azabache aún resentida volteó su rostro.

—Digamos, tú que querías hacer amigos, deberías hablar con Marinette. Ya sabes, sobre lo del chicle—aconsejó Nino, el nuevo amigo de Adrien.  Nino era moreno, de ojos marrones, usaba lentes y una gorra roja. Siempre llevaba unos auriculares naranjas con bordes grises colgado a su cuello.

—Pero ¿Qué le voy a decir?—preguntó el rubio algo triste.

—Sólo di la verdad, amigo—le sonrió haciendo gestos con sus manos.

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Al final de clases la mayoría se había ido, solo quedaba Marinette quién al ver que llovía y al no traer sombrilla, decidió por quedarse a esperar que la lluvia cesara. Adrien justamente salía ya con su paraguas en mano y la saludó al verla, pero esta volvió a ignorarlo girando su cabeza a un lado. Al ver que aún seguía molesta con él abrió la sombrilla y dio dos pasos antes de decir:

—Yo solo quería que sepas que...La última vez, yo estaba tratando de sacar el chicle del asiento—volteó a verla—. Es verdad, ¿Sabes?

Sus ojos verdes miraron el suelo:— Nunca fui a la escuela antes... Nunca tuve amigos—mira el cielo cubierto por nubes grisáceas, todo parecía tan nostálgico—. Todo esto, para mí es...Un poco nuevo.

Al decir esto se da vuelta hacia ella y le extiende la sombrilla. En ese momento al ver sus dulces y sinceros ojos verdes, Marinette sintió su corazón latir más de lo normal, su estómago dio un tirón y sus ojos cambiaron su modo de visión; ella vio más allá de ese rubio cabello y esos ojos verdosos...Marinette se enamoró. Sin alejar  sus ojos del chico frente a ella, la ojiazul acercó su mano tomando lentamente el paraguas que este le extendía, sus dedos se rozaron por una fracción de segundos pero solo eso bastó para que una pequeña corriente eléctrica recorriera en donde él tocó- aunque Marinette no se dio cuenta por el simple hecho de que todavía se encontraba en estado de shock que le habían dejado tanto las palabras del rubio como sus grandes y sinceros ojos verdes. 

Para su mala suerte-o quizás no- el paraguas se cerró sobre su cabeza a los segundos de tomarlo causando gracia a Adrien, quién no tardó en romper en carcajadas. La azabache quedó fascinada por la forma en la que reía, le parecía tan adorable y hermoso que rió junto a él. El chico paró de reír y se despidió de Marinette con una sonrisa ladeada sin mostrar los dientes. 

Cuando pareció regresar a la realidad Marinette dejó caer su mochila mientras veía irse al rubio.

—Sí, nos vemos... Nos vemos mañana. Bueno no, hasta mañana, quiero decir... ¿Por qué estoy balbuceando?—se preguntó a sí misma. Nunca antes lo había hecho al hablar con alguien y mucho menos lo hizo al hablar antes con ese chico...Sin embargo, cuando lo escuchó hablar así y cuando vio directamente esos grandes ojos verdes, pudo ver más allá de ellos y eso la hizo sentir...diferentemente bien.

Tikki, la kwami de Marinette, salió de su bolso respondiendo a su pregunta:

—Tengo una idea de porqué.

Desde entonces Marinette no solo balbucea al intentar hablar con Adrien, sino que también siente sensaciones inexplicables; son hermosas...pero a la vez también son malas.

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Holas♥

¿Cómo están miraculers?

Espero les guste el prólogo♥ 

El capítulo 1 les voy a dejar luego :3

Si les gustó no olviden de votar y comentar sus opiniones que son muy preciado para mi♥

Gracias por leer♥

Bye-bye pequeñas mariposas♥

-Anna✧