La verdad nunca se sabrá... Ethan Mars, un investigador privado, será sometido a visualizar la condena de su especie hasta la extinción mental. Iniciará entonces una batalla por sobrevivir el mayor tiempo posible. Pero, ¿Para qué? Si ya todo está p...
26 de Junio al medio día (Agencia de investigación privada "La hora"): Mí condenado café sin azúcar se ha enfriado y la taza descansa sobre el mesón de mi escritorio, me encuentro con la maldita rutina un martes cualquiera. Llevo un tiempo sin investigar casos puesto que al último estúpido que se las dio de asesino en serie el mes pasado lo encerré en la cárcel hasta el día del juicio final. Ese cojonudo me agotó el cuerpo con sus pistas por todos lados, puesto que el tío tenía hermanos gemelos que trabajaban como dobles en una red familiar de mierda, y fue así que seguir idiotas de un punto a otro me agotó temporalmente las ganas de correr e investigar.
Tampoco parezco tan interesado en correr e investigar las desapariciones de esos "perros" políticos que destaca a ratos mi vieja radio y que visualmente la televisión ya comienza a hacer ecos. En su lugar prefiero leer un pequeño titular de la hoja número 3, se trata de un informativo poco importante y apenas perceptible en la hoja, destaca fotografías tomadas de enormes agujeros en la tierra que sucedieron en los campos al norte de la ciudad, registradas por los propios dueños del lugar. También informa que ocurrió otro en Nevada ayer al medio día, al parecer también en un sector rural y alejado. Enciendo un cigarrillo y completo la noticia con suspicacia. ¿Qué relevancia tendrá esta porquería de noticia? (Pienso un minuto). ¿Llenar un condenado espacio blanco del diario?
Por motivos que desconozco, con mi ceño fruncido me levanto a encender el pc, me dirijo a la vieja y poco usada impresora que tengo en la oficina, conecto los endiablados cables y luego de buscar información de los distintos agujeros, imprimo las 2 fotografías de los estados y las comparo con dudas e incertidumbre un momento. Descubro entonces que de veras quiero cambiar el foco investigativo y dejarle los tipos malos y esas desapariciones políticas sin sentido a Norman por un tiempo.
Le doy vuelta un momento a las similitudes mientras cargo y descargo mi arma en un acto compulsivo por encontrar mi maldita concentración. La noticia sin duda me llama la atención por un motivo que desconozco, después de todo, cualquier loco se pone a cavar en un campo... Sin embargo el agujero más cercano fue realizado a un par de horas de aquí, conozco el lugar porque mis padres vivían en las cercanías al tiempo de casados. Quizás no sea un caso de real importancia pero me servirá para distraerme un poco y recordar paisajes anteriores, momentos felices de vacaciones familiares en el campo... ¿Qué se yo? Cualquier tontería feliz.
Luego de mear, ajusto mi pantalón en mi gordo culo, le arranco la hoja al periódico, descuelgo mi saco café, salgo de la oficina y me alejo en el auto.
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