Capítulo 3.-Dulces.

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Recordé que Armin no sabía mucho de comida, y ni corto ni perezoso, hoy le llevo una sorpresa.
Me senté donde siempre a esperar.
A la media hora, ví burbujas en el agua.
Armin emergió, mirándome juguetón.
-¡Eren, sabía que vendrías!.-Agitó su cola.
-Sí, y mira lo que te he traído.-Le enseñé un frasco pequeño.
-Huele bien, ¿Qué es?
-Se llaman chuches.
-¡yo se lo que son! Los humanos tiran muchas al agua.
Armin desenroscó el bote, y empezó a coger una tras otra.
-Pero no comas muchas, o sino...¡explotaras!
Armin me miro con miedo, solo era una pequeña broma, ¿no?
-No me mires asi, solo bromeaba. Eso sí, te juegas un dolor de barriga.
Armin paró de comer y me devolvió el bote.
-Guardalo y traeme más mañana, en el agua perderán el sabor.
-Vale, además pensaba venir con el bañador debajo, asi podré nadar contigo.
-¿Enserio o es broma también?
-Enserio, ya hace mucha calor.
-Bueno si tu lo dices...
-Me voy.-Le lance un osito de gominola.-Me voy.
-¿ya?
-Si, mi hermana es una pesada.
-Yo no tengo hermanos.
-¿No? Menos mal. Adiós, recuerda venir antes y asi tenemos mas tiempo.
-Okey Eren.
Armin se alejó, su destelleante cola me volvía loco.
Mikasa sospechaba de que tenía citas tras cada entrenamiento.
No se si es mejor que lo crea, o que se de cuenta de que es un tritón...

Enamorado De Una Sirena|Eremin, AU|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora