La Vida De Un Judío

Sábado 17 de septiembre de 1939

Un día bastante raro pero con muchas sorpresas, por ejemplo que hoy la unión soviética ataco Polonia y que hoy me senti como nunca me había sentido, libre y único.
Te cuento como fue todo:
Hoy me desperte como todos los días y me puse a hablar con Hadar, a continuación se despertó mi hermana y me dijo que ya era de huir.
Entonces abrí la puerta y propusimos que todos lo que quisieran venir era invitado.
En ese momento se levantaron las gemelas y Hadar, nos dirigimos a la puerta principal pero derrepente oimos dos voces de dos hombres viniendo hacía nosotros, iban a abrir la puerta cuando derrepente suena una sirena y se van para otro lado, aprovechamos y salimos corriendo, pasamos por debajo de una valla media rota, corrimos y corrimos hasta que llegamos a mi casa o por lo menos en la que estaría mi madre.
Cuando llegamos me di cuenta enseguida, estaba quemada, en ese momento solo quería llorar pero en vez de eso empeze a gritar ¡mamá! ¡mamá! ...
Mi hermana me tapo la boca y me dijo:

-Tranquilo seguro que mamá esta bien. Y me dio un abrazo.

Al no poder quedarnos a dormir allí decidimos seguir caminando un poco más, al cabo de una hora encontramos una pequeña cabaña, no era muy grande, no tenía muebles sino solo una radio y un montón de paja. Encendí la radio y derrepente se oyó:

-Hola buenos días queridos compatriotas, queremos comunicar que hoy la unión soviética ha atacado a Polonia.

Nos miramos todos y con nuestras miradas se notaba que teniamos miedo y hambre, por suerte dije que había visto cerca de allí un naranjo y a lo mejor había algo.
Hadar y yo nos dirigíamos al naranjo riendonos cuando de pronto el me BESA en los labios, senti miles de cosas como mariposas en el estómago, un cosquilleo en los labios que nunca había sentido y un cariño diferente a todos los demás , desde hacía ya un tiempo el era el que me gustaba pero no sabía si yo a el también, por eso me sentía más alegre aún. Todo lo bueno se tenía que acabar, el se separo de mi y empezo a decir que eso no estaba bien y yo le pregunté:

-¿El qué no esta bien?

-El beso que nos acabamos de dar.

-¿Por qué?

-No quería contarte mi pasado porque mi padre es un general nazi, yo un día me esta probando un pijama de rayas cuando me pillo un nuevo soldado, el me cogío enseguida sin que me dejara dar una razón y me encerró en la celda en la que tu me conosiste.

-¿Y qué hay de malo si nos gustamos?

-Pues que mi padre nunca me dejaría salir con un chico y menos con un judío.

-Que más da lo que opinen los demás, si tu me has besado es por algo, no somos tan diferentes si no lo quieres ver estas a tiempo de irte.Y me volvió a besar.

-Nunca te dejare me gustas y tienes la razón da igual lo que opinen los demás lo importante somos nosotros