Lunes 26 de septiembre de 1939

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Este es un mundo ingusto aunque eso ya lo sabía, decía mi madre que me sintiera orgulloso de la vida que tengo pero la verdad es que no me siento muy orgulloso.
Hoy salimos de la casa con la ropa que nos habían regalado y nos dirigimos al mercado del pueblo en el que todos estaban felices, aunque claro todos también eran nazis.
Allí compramos lo necesario como fruta y verdura o carne y pescado, pero luego algo nos hizo cambiar el rumbo a nuestra casa, era ¡¡NUESTRA MADRE!!.
Ella estaba vestida con la misma ropa con la que la vi por última vez, solo que esta vez estaba trabajando para otra mujer con pinta de tener mucho dinero debido a que llevaba puesto un abrigo de piel de zorro.
Decidimos perseguirla hasta que por fin se metió en una casa enorme de dos pisos y una bandera nazi en la puerta.
Pensamos mi hermana y yo de avisarle que estábamos vivos pero al ser una casa tan grande intuimos que también tendrían vigilantes.
Asi despues de ver a mi madre cerrar la puerta nos fuimos directos a la casa de la pareja desgraciadamente fallecida.

La Vida De Un JudíoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora