Conociendo La Felicidad

Capítulo Dos

Me encontraba en las afueras del centro comercial. En la parada de taxis.

No habían casi carros disponibles asi que me senté en los bancos de afuera a esperar.

La pizza quemaba mis piernas. Tenia mucha hambre, pero no quería comer aquí afuera.

Mire mi reloj. Eran las 15:40.

Miraba hacia la nada. Pensando que haré con mi vida, como siempre. Creo que nunca lograré cumplir mis metas.

Vi a una niña que caminaba junto a su madre y su hermano menor, y un recuerdo se apoderó de mi mente.

FLASHBACK

"Christiana tomale la mano a Marcos que se va a perder!" Gritó mi madre.

"Vale mami" Tome a marquitos por su mano y lo lleve hacia donde se encontraba mamá.

Eramos solo Mamá, marcos y yo. Felices, o eso intentábamos, aunque faltaba papá eramos la mejor familia que podría querer, o eso creía yo.

Marcos tenia cuatro años, y yo tan solo diez. Era el dia de las madres y nos encontrábamos en el centro comercial pasando el dia con nuestra madre.

"Mami, llevo todo el mes reuniendo para comprarte tu regalo, y tengo dinero suficiente ¿Qué quieres que te compre?" pregunté enseñando mis dos billetes que cambie en la cantina de la escuela.

"Pues.. que tal si compramos un labial? Uno para ti y uno para mi? Para vernos igual de bonitas" sonrió mi madre.

"Bien mami, toma" le entregue el dinero.

"Gracias mi pequeña" beso mi frente. "tú y marcos son lo mejor que me ha pasado" Sonó con algo de frialdad en su voz, algo triste, ¿cómo no? Mi padre le había roto el corazón. Pero yo debía acabar con aquél dolor: Siendo la mejor hija de todas.

Miré hacía sus manos y pude contemplar la manera en la que intentaba sacar mas dinero de su billetera sin que yo me diera cuenta. Otra vez el dinero no me alcanzó.

FIN FLASHBACK

Lágrimas comenzaron a caer de mis ojos. Siempre que la recordaba me ponía sentimental.

Sentí que alguien puso sus dos manos en mis ojos. No sabia quien era. Aqui no tenia amigos, asi que comencé a asustarme. solté mis bolsas y la pizza para intentar quitar las manos de mi cara, pero aquel chico si que era fuerte.

"Que ya no me reconoces?, porque en casa siempre adivinabas" hablo una voz masculinas y enseguida reconocí.

El chico me soltó y yo me di la vuelta. Aunque estaba completamente segura de quien era tenia que salir de dudas.

"¡Jason!" grité y me le lancé encima.

"Calmate Chris me mataras" dijo con la voz entrecortada ya que le estaba apretando el cuello.

Lo solté y esta vez el me abrazó.

"Volviste" dije con una sonrisa. Sabia que algo pasaría hoy, pero nunca imaginé que fuera algo así.

"No, aún sigo en Australia. Esto es un telegrama" dijo burlón.

"Ja ja ja..." dije seria. El se creía muy gracioso.

Luego de un largo y serio silencio soltamos en carcajadas.

"Como supiste que estaba aquí?" pregunté.

"Shana me lo dijo. Deje todo en la casa. Quería hacerte una sorpresa pero no estabas en el departamento. Cuéntame que has hecho?"

"Pues.. Trabajar."

"Oye.. Te he mandado mucho dinero. ¿por que sigues trabajando?"

"A mi no me ha llegado nada"

"Mataré a Oscar. Ven, vamos a la casa" dijo tomando mis cosas.

Subimos a su auto, y el manejó hacia el departamento. En el camino ibamos hablando de cosas. Adoraba a este chico, era como mi hermano mayor.

"Venderé el departamento" soltó.

Ya va.. que venderá el que?. No habla enserio. Y si el se va? ¡¿Donde viviré yo?!

"Y eso? compraras otro?" pregunté.

"No, de eso quería hablarte. No quiero dejarte sin casa. Pero ya no puedo mantener tres casas, quería proponerte algo"

"Que cosa?"

"Vamonos a Estados Unidos, compre una gran casa alla y papá abrió una nueva empresa en Denver, yo soy el jefe y dueño de esa empresa"

"Espera.. empresa de que? Casa? Desde cuando tienes Visa? oye la próxima ten mas contacto conmigo, esto es demasiado"

Comienza a reír "Cariño, no habrá próxima. Te estoy ofreciendo venir conmigo" dice aun riendo.

Y ahora que veo. Ha cambiado mucho. Ahora es mas guapo, o es que me estoy volviendo loca por no ver chicos tan seguido.

"Pero yo no tengo dinero para irme, además ni Visa. Yo no tengo nada..."

"Christiana, yo te pagaré todo. Eres como ni hermana y no pienso dejarte aquí, ahora que tengo el dinero suficiente para mantenerte a ti y a cien personas mas, quiero darme el placer de hacerlo. Tu solo preocupate por estudiar" dijo ya serio.

"Estudiar?" pregunté.

"Pagaré tus estudios. Me has dicho que quieres estudiar fotografía. Pues se que has sufrido muho y yo solo quiero lo mejor para ti"

"Jason.. esto es demasi.."

"Para mi no es nada hacerlo - paro el auto y me miro fijamente" Quiero hacerte la chica mas feliz del mundo ¿De acuerdo?" dijo para luego salir del auto y dirigirse hacía la puerta trasera para sacar mis bolsas.

Ni cuenta me había dado que ya habíamos llegado. Salí de auto y justo cuando cerré la puerta escuche el pitido del seguro. Mire hacia Jason quien esperaba a que saliera del auto, lo quise ayudar con las bolsas pero se negó. Asi que solo lleve la pizza.

Llegamos al departamento y el colocó las bolsas en mi habitación. Yo me senté comer mi pizza en la mesa de la cocina.

"Estoy acostumbrado a tanto lujo ya, que esto me parece una fachada" dice mirando la casa.

"Pues para mi es un super departamento de lujo" digo con la boca llena de pizza.

"Como has crecido" se acerca a mí "cuando me fui solo eras una nena de dieciocho años, y mitate" se sentó a mi lado" toda una mujer.

"y tu?" lo mire "Ya no pareces feto de canguro" reí.

"Que graciosa" comenzó a reir" no me das?" dijo refiriéndose a la pizza.

"No" lleve la caja conmigo hasta el mueble.

"Por que?" se acercó a mi.

"Porque te fuiste por dos años y medio y ni un mensaje me dejaste..."

"Pero volví, por ti"

"Pero te extrañe tanto..."

Se sentó a mi lado y pude sentir un calido abrazo. Estaba muy feliz. No se porque me hacia tanta falta. Estos dos años me ayudaron a darme cuenta que el ya era parte de mi vida.

"y ahora.. Me das?" pregunto.

Le di un pedazo de pizza. Pero solo uno. Que ni piense en pedirme uno mas porque no le doy. Ni un cuartico mas.