De fuera la cafetería esa se veía como cualquier otra, sin embargo, en cuanto entré, un cálido y embriagante aroma a café y desayuno me dio la mas increíble bienvenida.
Caminé por entre las mesas, buscando con la mirada a Wendy. Al final, la encontré sentada junto a una ventana. Me alegré de que mi viaje no hubiera sido en vano, pero luego noté que otro pensamiento me invadía: se veía hermosa. Llevaba unas pantalones negros ajustados, una playera negra con estampado de margaritas y unas botas negras. Su cabello largo y ondulado estaba recogido en un moño.
—Hola —saludé mientras me sentaba.
—Pensé que no llegabas.
—Pero llegué, la cosa es que me levanté muy tarde, porque no pude dormir y...
—No importa, yo te estaba esperando, así que mira la carta, que me muero de hambre.
Inspeccioné la carta, y al final me decidí por un café y una crepa margarita (tomate, queso y albahaca, muy buena, por cierto).
Mientras esperábamos a que nuestras cosas llegaran, conversamos un rato, de cosas sin importancia, como gustos, el odio a los profesores, nuestras edades (iguales, por cierto), comida favorita y demás.
Cuarenta minutos después, la comida por fin llegó, justo cuando le preguntaba a Wendy el como se había dado cuenta que era lesbiana.
No me respondió, en ves de eso se llevo el sándwich que había pedido a la boca y comenzó a devorarlo.
—Ahorita te digo, es que me estoy muriendo de hambre.
Y eso se notaba. Quise decirle algo sarcástico, pero no le tenia tanta confianza para empezar con mi acidez, así que me callé la boca.
—Pues, me enamoré de mi mejor amiga y ahí fue cuando dije "súper si me gustan las viejas", le robé un beso, me mandó a la chingada y fin —y sonrió de una forma irónica, como diciendo "wuuu, que chida que es mi vida", todo con ironía, claro.
Eso me dejó pensando. Era obvio que la sonrisa había sido porque le dolía recordar eso, incluso hasta se burlaba de su vulnerabilidad.
¿Y si mi hermana había sentido lo mismo? ¿Y si la lastimé con mis actos? Hasta ese momento no se me había ocurrido pensar en ello. Siempre me había visto a mi como la única víctima, la única afectada, que sufrió, y nunca pensé que mi hermana igual había sufrido, no solo por el hecho de el rechazo de su hermana, si no aparte de una persona que le gustaba.
—¿Me estas escuchando? —chillo Wendy, regresandome a la realidad.
—Perdón, ¿que decías?
—Que tengo que irme, mi madre me ha llamado, no te lo dije, porque no preguntaste, pero tengo una hermana de cinco años, y tiene asma, y ha tenido un ataque muy feo, y está en el hospital, lo siento —mientras lo decía, recogía sus cosas y pedía su comida para llevar.
—No te preocupes. Te llamare luego, para ver como esta tu hermana.
Nos despedimos y ella salió corriendo.
Un sentimiento de tristeza me invadió en cuanto se fue, y no entendía eso. No era mi amiga, solo me caía bien, y tampoco podía sentirme atraída por ella. Sin embargo me llamaba mucho la atención y me emocionaba su presencia.
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Esto no es amor // Eve & Melody 1
Short Story[Primera parte de la trilogía "Eve & Melody"] «Medio basada en una historia real» Eve odia y detesta a todas las mujeres homosexuales, bisexuales, y en general que gusten de otras mujeres, debido a que tuvo su primer beso con su hermana, lo cual l...