Ejemplo #4

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—¿Qué podría ocurrirte? —cuestionó ella—, nada pasará. Vamos, te acompañaré.

1. Este diálogo empieza con un signo de interrogación. El trato en esta situación es el mismo que tendríamos si se tratara de un diálogo normal. El signo va pegado al guión inicial y separado del guión de inciso. Los siguiente ejemplos serían incorrectos:

— ¿Qué podría ocurrirte?

—¿Qué podría ocurrirte?—cuestionó ella.

2. El verbo dicendi está en minúsculas, como corresponde, ya que el hecho de que haya un cierre con un interrogante no influye en él.

—¿Qué podría ocurrirte? —Cuestionó ella—, nada pasará.

3. El cierre del inciso del narrado está acompañado de una coma, como podría estarlo de un punto e incluso de un punto y coma (;) o dos puntos (:). Por ende, la palabra que le prosiga irá en minúsculas. Ejemplos erróneos:

—¿Qué podría ocurrirte? —cuestionó ella—, Nada pasará. 

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