Cosas de osos (Fnaf)

EXTRA 3: Amando a 2 osos a la vez (parte 3)

-Venga osito, no seas tímido -me dice el pervertido de Freddy a la oreja, mordiéndola levemente para que mi sonrojo se intensifique.

-¡F-Freddy por favor esto no era lo que vine a hacer a tu cuarto, d-dijiste que querías enseñarme algo! -por fin consigo decir algo a pesar de la extrema vergüenza que estoy sufriendo, sus caricias son realmente una maldita droga y encima está metiendo las manos bajo mi camisa, ¡por Dios a este paso acabaremos cómo en el backstage!

-Claro que te voy a enseñar algo... Mi flor~

-¿Qué flor?

-Mi flor de poronga~ -responde él sacándome la lengua, con una cara de pervertido y alargando la última "o" y la "a".

-¡Dios Freddy qué malo! -comienzo a zaramdearme más que antes pero es inútil porque es jodidamente fuerte a pesar de ser un vago.

En un principio Freddy me había sorprendido limpiando un poco el backstage y me había dicho que quería mostrarme algo y yo como buen estúpido sumiso enamorado que soy tuve que aceptar, pero lo que no sabía es que las verdaderas intenciones de Freddy eran empotrarme duro contra el muro porque estaba realmente caliente, enserio, ¡nada más sentarme en sus piernas ya le pude notar que tenía el paquete duro como una piedra!

-¡Freddy mira Toy Freddy vestido de marinero con minifalda! -grito ya desesperado, señalando un punto al azar de la habitación y rezando para que se lo trague.

-¿¡DÓNDE!? -exclama él mirando al punto de la habitación que he señalado, mi oportunidad.

Con la distracción y como un sigiloso relámpago consigo escapar de sus fuertes brazos y me encierro en mi habitación, seguramente dejándolo con los ojos como platos y con cara de atontado, enserio que lo imagino y me da risa, pero al menos ya puedo respirar tranquilo. Nunca pensé que ese oso fuese a ser tan pervertido, pero nunca hay que juzgar a un libro por su portada porque es un pervertido sin remedio. El gran Freddy más vago que las piedras resulta ser todo un acosador de Toy Freddy's... Como me pille me va a doler el trasero por varios días y tengo que trabajar, así que no creo que me le vaya a acercar mucho si no quiero acabar como el sumiso que soy... Dios qué vergüenza...

Entro al baño de mi habitación y enciendo la ducha para, bueno, obviamente ducharme, no va a ser para ver el agua correr, el polvo y la suciedad se me ha pegado a la ropa y al cuerpo pero creo que a Freddy eso le daría igual con tal de poder retozar... ¿¡Y por qué me tiene que venir a la mente Freddy!? ¿No será por el hecho de que ese pervertido fue el primero en poseerme? Sí es por eso pero... Aquello iba a ser para Gold en un principio... Pero también quise hacerlo con Freddy... ¡Rayos otra vez pasa lo mismo!

-Frederic... ¿Estás ahí? -es la voz de Goldy... Dios tengo que sonar tranquilo y tratar de mantenerme cuerdo.

-Sí Gold estoy duchándome, tranquilo que ya termino.

-Está bien, tengo que hablar contigo un momento así que esperaré.

No... No... ¡NO! ¿¡NO ME DIGAS QUE SE ENTERÓ!? ¡ESTO ES HORRIBLE NO! ¿Pero como se entero? ¿Se lo dijeron las chicas? ¿Sí, no, no, sí? ¡Dios no quiero que me deje! ¡Seré lo egoísta que quiera pero no puedo ser realmente feliz si no estoy con ambos! ¿Por qué por qué por qué po-?

-¿Toy estás bien? -la voz de Golden me saca de mis pensamientos, sin percatarme ya estaba vestido y sentado sobre las piernas de Golden en la cama, su rostro muestra una serena sonrisa mientras su mano acaricia mi cabello recogido en una cola de caballo.

-Sí estoy b-bien -me tembló la voz, ¿qué escusa le pongo? ¡Ya sé, además de que en parte es verdad! -Eres tú el que me hace temblar y derretirme con tu amor -lo acompaño de una dulce sonrisa y listo, parece que le esté mintiendo pero no es así, yo le amo como amo a Freddy pero...

-Eres realmente tierno -otra sonrisa suya que me parte el alma, ¡por favor deja de ser todo un sol conmigo o terminaré por contártelo y no quiero eso!

-N-No soy tierno... -inflo mejillas coloradas a la par que digo esa frase con un tono más agudo, lo que hace que el se ría no con malicia, sino con cariño, mi estúpida mente me hace ver y hacer cosas adorables.

-Sí lo eres tontín -con esa sonrisa él se acerca a mis labios y los besa con cariño, ¿¡Por qué tienen que sentirse tan bien estos besos que él me da?!

Correspondo abrazando su cuello y el mi cintura, profundizándolo, volviéndolo húmedo y pasional. ¿¡Dios por qué me has hecho así, por qué me haces amar a dos personas a la vez?! ¡Esto es una prisión de amor ardiente y pasional con la que me acabaré quemando, lo sé, pero es demasiado adictivo! Nos separamos y yo no puedo evitar ponerme rojo como un tomate mientras el sujeta mi mentón y profundiza en mis ojos.

-Te amo osito, eres... Hermoso, simplemente hermoso -su sonrisa es tan cálida, y sus palabras son... Su voz es como un ángel guardián...

-Y-Yo t-también te amo...

Nos quedamos mirándonos y volvemos a juntar nuestros labios de forma pasional. Al separarnos no consigo articular palabra pero él, él rompe el hilo de saliva.

-Verás osito, vine a verte para pedirte que vayamos a tomar algo -... Vuelvo a estar en el cielo, definitivamente, ¡pero que tierno que es!

-¿Tengo que ponerme traje y todo eso? -sé de sobra que Gold tiene gustos refinados y le gusta ir a sitios elegantes, es todo un sibarita en ese aspecto.

-No, no es necesario, quiero que vayamos a una cafetería y tomemos algo, ir a pasear y simplemente hablar -... ¿¡Puedo decir que es el chico más tierno de todo el mundo!?

-E-Está bien p-pero quiero cambiarme igualmente.

-Puedo ayudarte a escoger sí quieres -su sonrisa amable y calmada me hipnotiza con esos misteriosos ojos...

-Claro... -no puedo evitar el sonrojo en estos momentos que paso con Golden, siempre termino como un tomate por culpa de los nervios... ¡Pero esque lo amo mucho!