Bully

Julia:

Me dirigía a la escuela junto con Chuck y Sam. Ellos hablaban por su lado, a unos centímetros alejados de mí y yo voy por mi lado, pensando en Jake. Me preguntaba si ya se habría olvidado de mí, un chico tan apuesto como él seguro tendría a miles de chicas a su alrededor, chicas mucho mejores que yo. 

Al llegar, lo busqué por todas partes, esperando a que también me buscara, cosa que obviamente no hizo. Lo encontré con sus audífonos negros, rodeando su pelo castaño, mientras escribía en un cuaderno, su cuaderno. Estaría escribiendo sobre su vida, la cual todos desconocen. Estaba observándolo desde una pared, lo más desapercivida posible. Lo admiraba cómo en una película, yo no existía pero él era el protagonista. Lamentablemente sí existo, así que notó mi precencia y cuando pude volver a la tierra, sus ojos se encontraron con los míos y me sonrojé.

Já, que desapercivida.

Sonrió levemente, apoyó sus manos en el césped las cuales le dieron apoyo para levantarse, cerró la tapa de su cuaderno y se dirigió hacia mí.

-Kristen- me saludó

-Hola- le respondí, con la voz débil

¿Dónde quedó eso de ser la chica fría? Te estás exponiendo, vuelve a la tierra, mierda. 

-Me preocupabas- dijo- Has faltado demasiado y...- dejó la frase allí

-¿Qué? ¿Qué pasa?

Me miró, diciendome con sus ojos que no quiero saberlo, pero si quería, la curiosidad es mi mayor defecto.

-Te he visto cubierta de sangre, eso bastó para no dejar de pensar en qué te había pasado, pero hoy estás bien- suspiró, ¿Aliviado?

Ha pensando en mí, lo dijo. Ha pensado en mí, en mí, en mí. La niña pequeña que llevo dentro comenzó a saltar en mi interior. 

-Ah...Sí- me rasqué la nuca- Larga historia

Jake miró hacia el gigante reloj que estaba en la pared del edificio, luego volvió la vista hacia mí y sonrió.

-Tengo tiempo

...

-Lo siento- me disculpé con quien acababa de tropezar 

-Cómo sea- dijo una voz femenina, molesta

Había pensado mucho en Jake luego de lo que ha pasado hoy. Tanto que me desconecté de este mundo y tropecé con aquella chica. Me di la vuelta, fue un accidente ¿Qué le pasaba? Aquella chica siguió su camino, era rubia y estaba vestida de negro, sólo podía ver su espalda. 

-¡Eh!- grité

La rubia se dió vuelta, a la vez que rodaba sus ojos. Tenía mirada fría, una auténtica mirada fría, no cómo la mía, que era totalmente fingida.

-¿Qué quieres?- se cruzó de brazos

-Sólo ha sido un accidente, no tienes por qué molestarte

-Me molesto porque las personas sólo piensan en sí mismas y no le dan importancia a las demás- bufó

¿De qué habla?

-Mira, hoy me ha pasado algo y estaba muy distraída pensando en eso

-Vale- dijo- Lo siento

Sólo se escuchaba el sonido de los autos que andaban por las calles, nosotras estabamos en un completo silencio. Aquella chica torcía los labios y saltaba sobre sus talones de vez en cuando, mientras que yo apartaba la vista. 

-Soy Julia- me extendió la mano

-Kristen- la acepté

Comenzamos a caminar. Julia era muy misteriosa, parecía la hermana gemela de Jake, a excepción de los rasgos. Es hermosa, tiene cabello rubio y ojos azules únicos. Es alta y tiene buena postura, también tiene una voz firme y clara. Podría ser la chica perfecta, pero tiene una cara inexpresiva, cómo si ya nada quedara ahí dentro. También tiene ropa y maquillaje negro, tratando de esconder su belleza. No se tiene ni un poco de amor por sí misma. 

Su teléfono sonó y me anunció que debía irse, y eso hizo. 

-Ella es Julia- dijo Chuck

¿Acaso este chico siempre aparecía detrás de las personas?

-¿Cómo lo sabes?- pregunté

-No somos tan diferentes- suspiró- La conocí en un grupo para depresivos o algo por el estilo, estaba en una mala época- metió las manos en sus bolsillos- Sufrió la misma crisis que yo, un padre ausente permanentemente.