COMPLICATED (Ricky Horror y tú)

Capítulo XXI

Nota: Los siguientes capítulos serán flashbacks de la relación de _____ y Ricky, para que se den una idea de como era todo con ellos cuando se conocieron, espero que los disfruten, ¡gracias!

Flashback

El sol de la mañana entra a través de mi ventana, aun no quiero levantarme, pero en cuanto recuerdo que hoy volveré a verlo, una gran sonrisa aparece en mi rostro, y no puedo sentirme mas que feliz.

Hoy tendré una cita con Ricky, el chico misterioso que conocí en el concierto de mi banda favorita, y sinceramente estoy muy nerviosa.

Tomo mi bolso y me dirijo a la cafetería que esta cerca de mi casa, pues es ahí donde lo veré.

Cuando llego, el ya esta ahí, y luce increíble, lleva una chaqueta de piel, su cabello negro cae por sus hombros, siempre viste de negro, y eso lo hace ver mas interesante; y en cuanto sus hermosos ojos grises me miran, me siento en el cielo, me reconfortan, y la sonrisa que los acompaña, me invita a no desear otra cosa, mas que estar para siempre a su lado.

-Hola... -digo tímida, al encontrarme frente a él.

-Hola, _____ -sonríe de lado, y se para para ayudarme a sentarme, y cuando estamos frente a frente, no deja de mirarme- ¿Cómo estás? -nerviosa, pienso para mi.

-bien -su presencia me hace temblar, así que desvió mi mirada hacia otro lado.

-me alegra verte de nuevo -trata de encontrar mi mirada, pero no dejo de mirar al suelo- _____, ¿sucede algo? -me mira intrigado.

-oh, no -al fin lo miro de nuevo- es sólo que...

-¿qué? -parece preocupado.

-estoy algo nerviosa -admito con una risa tonta, mientras el me sonríe de nuevo.

-pues, no deberías estarlo, no te haré nada -susurra.

-lo sé, simplemente me hace feliz estar aquí contigo -su mirada es penetrante, trato de sostenerla, y casi lo logro, cuando la mesera se acerca para pedir nuestra orden, interrumpiéndonos.

Ordenamos pastel de chocolate y un café, aunque yo preferí un chocolate, pues es mi favorito.

Ricky no dejaba de hacerme reír, me contó que esta en una banda, y que algún día me presentaría a los chicos, luce tan adorable, que no puedo creer que este aquí, con él, con el chico mas increíble que he conocido en toda mi vida.

- _____, ¿quieres ir a caminar un poco? -pregunta dudoso.

-claro, la tarde luce hermosa

-no mas que tú -y ¡boom! eso hace que me sonroje a mas no poder, él se da cuenta y acaricia mi mejilla, haciendo que me sienta aun mas avergonzada.

Salimos de la cafetería, con rumbo desconocido, pero no me importaba, quería disfrutar al máximo estos momentos al lado de Ricky.

Seguimos caminando, ahora íbamos hacia un mirador que dejaba ver las luces de la gran ciudad, nadie decía nada, pero no era necesario, nuestra compañía era mas que suficiente; cuando casi estábamos a punto de llegar a dicho lugar, sentí como Ricky tomaba mi mano, y cuando voltee a verlo, el ya me miraba, y una sonrisa enorme se asomaba en su rostro, y en ese momento, no quise hacer nada mas, que saltar de la felicidad, hacia ya bastante tiempo que no me sentía así, y me alegraba que sucediera de nuevo, con él.

- _____ -estábamos viendo las luces, que parecían miles de diamantes sobre terciopelo.

-si, Ricky -sus ojos brillaban, y las mariposas en mi estomago, ocasionaban un pequeño torbellino.

-sé que hace apenas unas semanas nos conocemos, hemos hablado todo este tiempo, y hemos vuelto a vernos de nuevo, pero sé que debo decírtelo -me sentía ansiosa- eres hermosa, tan pequeña, eres mas de lo que había buscado, y que te cruzaras en mi camino... me gustas, _____, mucho -me miro apenado, y yo apenas podía creerlo, ¿enserio le gustaba a este maravilloso chico?.

-Ricky... -me interrumpió.

-entenderé si tú no sientes lo mismo, pero quería decírtelo -bajo la mirada, y me sentí mal, pues claro que sentía lo mismo, Ricky, me gustaba, mas bien, me encantaba.

-Ricky -me miro de nuevo- tú también me gustas, me haces sentir mariposas -baje la mirada, y me sonroje, pero sentí su mano tomar mi mentón, para que lo mirara de nuevo.

-eres adorable -me sonrió.

Y cuando pude reaccionar, sus labios tocaban los míos, sus manos estaban en mi cintura, y las mías tocaban su pecho, el beso era tierno, mientras el me aferraba mas a su cuerpo, y mis manos acariciaban ahora su cabello.

El aire se colaba entre el poco espacio que dejaban nuestros cuerpos, mientras de vez en cuando, sonreíamos a la par entre cada beso.

Me sentía feliz, afortunada, y sabia que no cambiaría este momento por nada, soy una romántica irremediable.