Cuatro meses después de nuestro encuentro en Paris sé que estoy completamente enamorada de Wild. Él es absolutamente increíble. Apasionado, divertido, compañero. Lo acompaño en varios de sus viajes de negocios aunque no ha hecho nada de surf ni de navegar en estos meses a menos que fuéramos a su casa en california lo que no era muy frecuente pero cuando estábamos allí cerca del mar algo en Wild parecía renacer. Un brillo y una alegría que en la ciudad no tenía. Yo siempre le digo que puede ir si quiere pero él se niego a dejarme demasiado tiempo a menos que sea por su empresa. Las noches son un volcán apasionado. El parece tener mucha más energía que yo y no puedo negarme cuando él me busca. Como tampoco se niega cuando yo lo necesito. Y lo necesito mucho... No nos dijimos un Te quiero mucho menos un Te amo... pero no hacia falta estabamos juntos sin nadie mas en el medio y eso para mi era suficiente.
En estos días estoy pensando en decirle seriamente si quiere que nos vayamos definitivamente a la casa de la playa, yo puedo trabajar en cualquier lugar y esa casa tiene un bello ático con mucha luz y está vacío.
Es sábado en la noche cuando se lo digo y algo en su mirada se enciende
_ ¿estas segura? Aquí está tu familia y tu empresa_
_ Wild, no es como si no tenga medios para viajar cuando quiera verlos, y mi empresa esta donde este yo puedo dirigirlo todo desde California, incluso si cambio mi base allí sé que mis empeladas estarían felices, amo como eres cuando estamos en la playa cerca de mar, es como si algo en ti reviviera, quiero hacer esto por ti y por nosotros también_ él me toma en brazos y me lleva al sillón, su forma de hacerme el amor demuestra cuán feliz esta.
Cuando le contamos la noticia a Mackenzie y a Colton no lo toman mal. Al contrario tienen la excusa perfecta para visitar la playa más seguido. Amo lo felices que son juntos como su vida es tal como quieren vivirla y como su amor los fortalece cada día.
Nos instalamos en la casa de Santa Bárbara y Wild me ayuda a instalar mi estudio en el ático. No es que alguna vez hayamos hablado de vivir juntos, pero así se dieron las cosas y estábamos bien con esto.
Compartíamos mucho tiempo juntos, yo diseñaba y me encargaba de mi empresa por las mañanas al igual que Wild con su empresa de elementos para deportes extremos.
Por las tardes yo me sentaba en la playa a diseñar y Wild remontaba las olas, nadaba o simplemente se quedaba al sol a mi lado. Me sentía feliz, muy feliz.
El invierno llego y santa Bárbara se volvió muy frio sin embargo la casa tenía un sistema de calefacción central que la mantenía cálida. Aun así muchas veces Wild iba a remontar olas y yo lo esperaba en casa diseñando y con café caliente y con esos pasteles tibios que a el tanto le gustaba comer cuando llegaba. El siempre olía a mar, a océano, era como si la playa viviera en él.
En navidad a pesar del frio Gia con los niños y Jax, junto con Mack y Colton y la bebe vinieron a pasar las fiestas en casa. Su Papa decidió quedarse con Hannah a supervisar el casino junto con el padre de Mackenzie quien sorpresivamente estaba trabajando con Emet, era experto en descubrir estafadores y tramposos.
Las fiestas pasaron entre ponche tibio, juegos de póker y películas. Amaba estar con las chicas y para años nuevo se nos unió Marixa y terminamos todos bailando hasta la madrugada.
Para cuando el verano volvió yo estaba atareada con los desfiles y demasiado concentrada así que arme un viaje sorpresa para Wild en Hawái. Había un concurso de surf y sus amigos lo habían invitado pero él no quería dejarme así que saque su pasaje prepare su maleta y lo obligue a irse. Sentía confianza en que el volvería. En un mes yo habría terminado con los detalles del desfile y viajaríamos a Milán para la presentación.
Nos costó separarnos pero quería hacer esto por él y además extrañarnos nos vendría bien. El me llamaba casi todas las noches y me mandaba mensajes y fotos todos los días. Se veía feliz, y eso me hacía feliz aunque lo extrañara demasiado. Fue para esa segunda semana cuando comencé a sentirme mal en las mañanas. Me levantaba con nauseas. El café me hacía vomitar, no podía si quiera nombrar a los huevos revueltos mucho menos algo frito.
Revisando mi agenda una tarde me di cuenta de algo. Mi periodo. No había venido, concentrada en mi trabajo y extrañando a Wild no me había dado cuenta y tenía un retraso de 4 semanas.
Fui a la farmacia y compre varios test de embarazo. Me hice los cuatro uno atrás del otro. Los cuatro dieron positivo...
Respire profundo. Debía sacar una cita con la ginecóloga. Debía decirle a Wild. Debía decirle a Colton y a Mackenzie... pero primero debía estar segura.
Llame a una ginecóloga de confianza y me dio turno para el otro día. De más está decir que esa noche no dormí. Di vueltas por la casa, diseñe como posesa y me comí una tarta entera de frutilla con cremas. Que en la mañana vomite.
Llegue al consultorio a tiempo y ella me recibió con una sonrisa tranquilizadora. Me hico la ecografía y lo confirmo. Llevaba cinco semanas de embarazo. Me dijo que los anticonceptivos podían fallar y que yo era una joven y sana mujer de 25 años y él bebe estaba en perfecto estado.
Volví a casa como en una nube. Llegue y llame a Wild pero no contesto. Así que tome coraje y le envié el mensaje
"Wild estoy embarazada. Llevo cinco semanas, llámame por favor"
Espere, y espere... pero Wild nunca llamo.
Wild
"Wild estoy embarazada. Llevo cinco semanas, llámame por favor". Un bebe, un hijo, una responsabilidad de por vida... me aterre y no la llame...
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Game Over 3
ChickLitSophia Spellman lo tenía todo, dinero, una carrera en ascenso, una familia que la amaba y amigas que darían la vida por ella. Cuando conoció a Morrison "Wild" Midelton supo que el significaría en su vida solo una cosa... problemas. Morrison "Wild" M...