Tarde agradable

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Habían pasado un par de horas...ya no lo podía soportar, era algo que la estaba consumiendo de a poco y debía terminar con eso. .

-Luis...-susurro con los dedos temblorosos y la cara sudorosa mientras le clavaba esos ojos azules como una daga flameante

-¿Si?..-respondió igual de agitado y con la concentración al limite

-Torre a E8...Jaque mate..-exclamo al fin victoriosa y se levanto triunfal mientras veía a su amigo haciendo pucheros y golpeando infantilmente el tablero con los puños

-No llores, a la próxima podrás ganar..-le replicaba feliz mientras se levantaban y caminaban alegremente a la biblioteca, caminando por los pasillos del colegio

-Si, si, esta vez no lo vi venir, a la próxima te ganare sin dudas..-le reclamo con jerga altanera

Ambos entraron a la biblioteca, vacía, como era de costumbre ya que casi nadie iba ahí. Los chicos preferían estar afuera jugando con una pelotita que meterse a un cuarto a enriquecerse culturalmente con un libro o novela. Alicia no entendía porque le veían tan mal a los libros, era el recurso más inagotable de felicidad para ella, pero bueno, tampoco los obligaba a leer, con que ella lo hiciera era más que suficiente

-Alicia, ¿Cuál es ese libro que venimos a buscar?..-preguntaba sentado con su mejilla sobre un par de libros apilados

-"Amor en los tiempos del cólera" de García Márquez..-respondió parándose de puntitas para alcanzar el mencionado libro que posaba en lo más alto de la estantería

-¿Y ese libro de que se trata?..-pregunto entre bostezos

-La verdad, no lo sé, nunca lo termine de leer solo sé que empieza con la muerte de un viejo..-se sentó en la mesa junto a Luis y de su mochila saco un par de plumas y un cuaderno

Comenzaron a redactar un resumen acerca de aquel viejo libro como parte de un proyecto para la clase de literatura, debían tenerlo terminado mínimo para el Jueves, así que aun tenían 2 días para acabar dicho trabajo. También se había preguntado qué pasaría con su profesor por lo del día anterior, ¿Por qué lo habrían regañado?, ¿habría cometido enserio una falta?, no tenia las respuestas en ese momento...ya trataría de hablar con el después, o mejor dicho de no hablar

Ya tenían casi todo acabado, cuando Fátima llego completamente ruborizada y con un humor de perros

-¡LO VOY A MATAR!, se los juro por dios LO MATOO..-grito eufórica mientras se sentaba bruscamente al lado de ambos chicos que la miraban sorprendidos

-¿Qué PASO?..-dijeron al unisonó Luis y Alicia abriendo los ojos como platos

-El imbécil de Ramsés me dijo: "hola mi amor" ¡¡en frente de todos!!!..-les contaba escandalizada

-¿Y saben qué?..¡Lo mande con su música a otro lado!, si antes no quería hablarle ahora no quiero ni verlo

-¿Cuándo llego que ni nos dimos cuenta?..-pregunto Luis con semblante confundido

-Siii, tu nunca te das cuenta de nada..-le escupió para después irse maldiciendo, hundida en su cólera y cerrando la puerta de la biblioteca con un portazo tras de ella

Ambos se miraron mutuamente tratando de adivinar que era lo siguiente que haría Fátima..Solo sabían que era más importante el trabajo

La tarde siguió su curso normal, Luis ya se había ido ya que era hora de salida, pero Alicia se quedo ahí terminando lo que faltaba. Ya tenía 12 horas listas, tal y como las había pedido así que se desahogo quitando los libro de encima y puso sus dedos suavemente en el borde de la mesa moviéndolos como una danza interminable de notas invisibles, simulando un piano

Sin querer se había pasado más de 15 minutos así, y es que en realidad sentía como si estuviera en casa tocando el piano, las suaves notas sonando al unisonó que los débiles toques de sus dedos contra la madera

No se había dado cuenta de que un par de ojos azules la observaban desde el marco de la puerta, al abrir los ojos para salir de su trance

Vio a una figura masculina con su brazo apoyado sobre el marco de la puerta, con su leve sonrisa de siempre y su larguirucha forma, se acerco y se sentó junto a ella. Alicia podía ver como sus ojeras enmarcaban sus ojos y su pálido rostro que daba enfoque a ello

-¿Tocabas el piano?..-pregunto con voz melosa mientras sacaba de la bolsa que llevada un par de libros

-No es lo mismo sin uno real..-confeso tristemente sacando también un libro para no tener que hacer contacto visual

-¿Y existe?..-pregunto

-Si lo tengo en mi casa..-respondió

-Vaya...yo pensé que lo traías ahí en la bolsa..-se burlo en tono sarcástico mientras daba la vuelta a la pagina

-¿Solo vino a burlarse?...-pregunto en tono serio mientras se metía mas en el libro

-No, quería saber como estabas..

-Bien

-Mentir es malo..-le acuso mientras seguía leyendo distraídamente

-Fingir que le importa también..-sentencio para seguir leyendo en silencio

Pasaron varias horas, y los dos continuaban sin mediar palabra alguna, solo estaban sentados uno en frente del otro leyendo sus respectivos libros y sin mirarse..o al menos eso parecía

De vez en cuando Lowrence levantaba un poco la mirada y veía a Alicia, tan concentrada en su lectura sus ojos avanzando lentamente hasta el siguiente renglón, y luego, hasta la siguiente pagina.

Era de las contadas chicas de su edad que conocía que le gustara tanto leer como a él, e incluso de la misma trama y algunos mismos autores que a él le fascinaban. Por lo general veía a chicas que leían moda y solo para pareceres interesantes, pero ella no, lo sabía. Ella no leía para ser interesante, leía para ser felices no importase que al final terminara provocando lo segundo aun así era genial conocer personas así.

....

De forma despistada, casi imprevisible, Alicia se asomaba por el lomo de su libro para ver a su profesor, como sus ojos azules se enfrascaban en tan interesante lectura, hacia ya mucho tiempo que no conocía hombre que le gustase leer, a excepción de su padre que era el que tenía una gran manía por los libros.

Pero Lowrence era diferente, a él le gustaban los buenos títulos de grandes autores y algunos no tan grandes, y aparte de eso le gustaba escribir, desde el poco tiempo que lleva conociéndolo siempre le dio curiosidad saber sobre que escribía, pero teniendo en cuenta sus gustos literarios podía casi asegurar que escribía terror.

Las ventajas de eso es crear un mundo alterno al que se vive todos los días, escapar de la realidad y hundirse en mundos ajenos al nuestro, navegar en las aguas del terror o de la fantasía y sumergirse en aventuras increíbles que llevaran al lector a conseguir una nueva forma de ver al mundo, mas nueva, más permisiva

Después de una ardua tarde de lectura, el profesor se decidió a levantarse, estirando sus músculos y parpadeando fuertemente para librarse del ardor

-Pensé aguantaría un poco más..-dijo levantándose de la silla y guardando sus cosas en su maleta

-Es algo tarde y tengo cosas que hacer..-contesto en tono algo grosero y se digno a irse sin decir nada mas

Alicia se sentía extraña, después de tan amena tarde solo se va asi como así, salió a toda prisa del aula y se dirigió hacia la salida

Lo localizo a un par de metros de la puerta, a punto de salir y se acerco lo más rápido que pudo

-Señorita Gottam, ¿se le ha olvidado algo?..-pregunto viéndola de arriba abajo

-Tenga..-le tendió uno de los libros que tenia para leer esta noche, pero a juzgar por sus ojeras supuso que le serviría mas a el

-Gracias..-respondió sonriendo un poco y acercándose para abrazarla, fue algo breve..conciso

Se decidió a salir igual, vio como el sol se escondía a lo lejos...ya le esperaría un huracán al llegar a casa por tal tardanza..

-Bueno, no sería la primera vez..-sonrió divertida y se dispuso a partir

Metástasis sin retornoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora