Una tarde tranquila que indicaba la mitad de un día cualquiera, mientras que en el bosque se los arboles de gran altura y que en conjunto evitaban el mirar lo que se encontraba en su interior. Si lograbas cruzar los más de 10 kilómetros que separaban aquella construcción de una carretera que raramente era transitada, podrás encontrarte con esa gran casa que a simple vista te captaba la atención con su aspecto tan antiguo y poco malgastado, pero que su tamaño también destacaba.
Era usual imaginarse el tipo de personas que podrían vivir en su interior, sin tener la menor idea o tan siquiera estar lo más cerca posible de la verdad.
El silencio y murmullos que abarcaba dentro de sus paredes era inesperadamente normal respecto a sus residentes quienes en su mayoría (por no decir casi por completo) eran jóvenes entre sus 15 y 20 años, todos podían variar de edad sin necesidad que tener que llevarse de mal forma con sus "compañeros"
La sala de estar, estaba en su mayoría ocupada, mientras que unas cuantas burlas y risas juveniles que hacían elevar el ambiente a un nivel infantil y un poco de convivencia.
Unos pasos profundos y calmados se hacían escuchar a medida que se acercaban a la estancia hasta finalmente encontrarse de frente, dando la bienvenida a quien se presentaba en escena. Un adulto de traje negro y piel totalmente blanca como una hoja de papel, destacando por su increíble altura y la falta de un rostro.
Dio una rápida mirada a su alrededor (algo fácil de captar por el movimiento de su cabeza) para después dejar salir de alguna parte de ese lienzo blanco con una leve silueta que intentaba dar el contorno de nariz y ojos, una tos áspera y que poco a poco elevaba el volumen que producía, originando una pequeña chispa de interés en los presentes mientras alzaban la vista hacía el sujeto.
- Me alegra no interrumpir algo importante -. Anunció.
- No importa, igual siempre harás lo que te plazca -.
Contestó un joven sentado en el extremo izquierdo del sillón, cubriendo parte de la frente, su flequillo de color negro al igual que el resto de su cabello , vistiendo una sudadero blanca y con un tono de piel igual que la persona de gran altura, con la diferencia de que no se veía tan natural, y si mirabas detenidamente notarías esos ojos azules que no te percatarías por la desafortunada suerte de concentrarte en esa sonrisa tallada hasta la punta de las mejillas cerca de la orejas.
Los demás testigos, solo voltearon a escuchar por unos segundos y después continuaron presentando atención a quien vestía de traje.
- Me sorprende de quien viene ese comentario -. Una broma, se supone. - Solo vine a anunciarles sobre la llegada de algunos nuevos miembros, que también habitarán en este lugar. Se supone que es un refugio para que ustedes puedan mantenerse en caso de ser descubiertos, pero solo por un tiempo, haciendo claras algunas excepciones. Ahora ya saben los motivos y les pido de manera atenta que eviten los problemas -.
Mientras uno por uno asentía como forma de aceptación, una voz infantil pero que parecía confrontarse con el tono de una joven, quiso añadir un último comentario en la conversación.
- ¿Se lo mencionaste a mis hermanos? -. Cuestionó la pequeña de cabellos castaños y ojos de un verde jade muy intenso.
- Ellos son quienes los escoltaran, mientras que dos los traen, uno más se quedará vigilando a la distancia en caso de cualquier situación -.
- Entiendo -. Afirmó - Solo quiero mencionar que sigo sin encontrar mi oso de peluche -.
- No te preocupes, Jeff lo tiene -. Agregó un rubio de camiseta verde y jeans de color marrón, sin necesidad de mirar a quien le dirigía la palabra.
- Maldito seas enano -. Contestó el pelinegro.
- Solo para que sepas, poco me importa pero a la vez considero que ya son los suficientemente grandes para dejar este tipo de cosas -. Volvió a responder pero ahora solo apartando su vista de la pantalla por casi tres segundos. - Vamos Sally, es solo un peluche -.
- Y tú un inútil amante de los videojuegos -.
Ignorando el comentario, el chico siguió en su mundo al igual que el resto.
El hombre de traje se marchó dando la espalda mientras que desaparecía su andar, algo extraño para quién poseía esa altura.
Algunos esperaban con ansias, mientras otros disfrutaban de su "rutina", a tan solo unos arboles de distancia de la edificación, una rama resistía fácilmente el peso un castaño con bolsal y gafas de color anaranjado que aún así no afectaban su vista, él solo observaba el resto de personas dejando pasar el tiempo muy lentamente.
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Holissss :3
Soy una nueva escritora y enserio espero que les agraden mis historias. Y si no, pues bueno que mas se hace verdad uwu
En fin hasta ahora aqui lo voy a dejar y se que es algo corto, pero es para comenzar bien n.nAtte. Valeri Mtz.
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Reviví. La voy a reescribir. Hasta me doy risa de leerlo. Espero les siga gustando (Nuevo y viejos). Nos vemos luego.
Atte. Rely.
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Clockwork x Ticci-Toby: Un Amor Asesino
FanfictionEl destino lo ha decidido, y Toby se encuentra con Clock, amor a primera se genero, que un asesino no se enamora es mentira. Un romance lleno de aventuras y asesinatos, que mataría a cualquiera que se interponga, por eso su amor se le conoce como "U...