Capítulo 4: Lluvia

3.8K 549 68
                                    

 Me tienes desperdigada en pedacitos,
brillando como estrellas y gritando,
iluminándome como Venus,
pero entonces, desapareces y me haces esperar,
y cada segundo es como una tortura,
un viaje por el infierno, no más, así que
busco un camino para dejarlo ir,
cariño, cariño no, no puedo escapar.  

Y contra todo pronóstico ganaré,
guárdate tu consejo, porque no escucharé,
puede que tengas razón pero no me importa,
hay un millón de razones
por las que debería perder la esperanza contigo,
pero el corazón quiere lo que quiere.
El corazón quiere lo que quiere 

Este es un moderno cuento de hadas,
no hay final feliz,
no hay victoria para nosotros,
pero no puedo imaginar una vida sin
momentos apasionantes que me hagan romper a llorar.

(Selena Gomez - The Heart Wants What It Wants) voa' a llorar :'v

Con un pedazo de piedra filosa que encontró en una parte de la playa, afilaba una rama gruesa, esperaba con ello hacer una lanza y pescar. Los estómagos de ambos rugían por algo de comer y quería hacer eso, darle algo de comer a Kyungsoo.

No se esforzaba por arreglar las cosas porque sabía a la perfección que aquello no tenía perdón, no después de esa vez que se fue sin decir algo. Se lanzó al mar, haciendo que las burbujas del mar le trajeran a flote sus recuerdos.

***

—¿Por qué lo hiciste? — Le preguntaba Sehun. Se apoyó en la pared de su nuevo cuarto, mirando las cosas que le faltaban por acomodar.

—No lo entenderás, Sehun, yo amo demasiado a Kyungsoo y — empezó a explicar pegando su celular a su boca mientras lo tenía en la oreja.

—Lo amas tanto que lo dejaste sin decir algo, claro — recriminó su amigo.

—Le dejé una carta explicando—

—¡Vaya! ¡Una carta! Como seguramente no lo tenías a lado para decirle que te ibas

—Está bien, lo siento, mira, tenía miedo, ¿sí? Él es mayor que yo, más maduro, más centrado. Va a un ritmo que me cuesta seguir y yo no me quiero quedar atrás, cuando me dijeron que podía terminar aquí mis estudios más rápido de lo planeado, no lo dudé, quiero que al regresar yo tenga algo que ofrecerle a él, no ser un niño, no quiero ser su carga — la línea quedó en silencio por varios minutos, sabía que seguía ahí por su respiración.

—Entonces no huyas así, fuiste la persona más horrible e inmadura al irte de esa manera y no, no te entiendo ni un poco — suspiró, sabía que nadie le entendería.

—Cuídalo, ¿sí? Sólo eso y dile que me apresuraré para estar en un año y medio allá en Corea

—Lo intentaré...

Y así comenzó la solitaria vida de Jongin, lejos por voluntad de la persona que amaba. Dispuesto a que, al encontrarse con él, sería diferente, tendría aquella fuerza que quería.

***

Salió del agua llevando consigo dos pescados, nada mal para su primera vez. El agua se le goteaba por todas partes, resbalándose por su pecho y luciendo mejor que nunca esa piel morena. Kyungsoo no podía apartar la vista de ello, sabía a la perfección lo hermoso que era, lo tentador que lucía y que era el sueño de cualquier persona el tenerlo así enfrente.

Sin embargo, en esos momentos parecía todo menos un sueño, sino una pesadilla de la que quería huir, no ver ese cuerpo que era irresistible sería lo mejor.

Varados ♒ KaiSooDonde viven las historias. Descúbrelo ahora