Sin fondo {HarryStyles} ❤️

Capitulo 1

3:30 pm. Me encuentro sentada en la esquina de la cocina, acompañada de un tasa de café soluble barato. La tía Helen está llorando en brazos de personas que no había visto jamás, me limito a mirar la hipocresía de la gente que esta a mi alrededor, fingiendo cierto dolor y compasión con la familia, vestidos de luto en honor a la persona que hace media hora le dimos sepultura. La mujer que estaba hace un momento con mi tía se abre paso entre las sillas y la mesa de comida para ponerme la mano en el hombro como muestra de apoyo.
-Edith, lo siento tanto, sabes claramente que tú madre y yo éramos muy buenas amigas, lo de su muerte me tiene en shock...- la interrumpo-
-¿Realmente eran amigas? Por qué yo no te recuerdo cerca de ella, incluso jamás te había visto en mi vida.
-¡Edith! - me reprime mi abuela- Compórtate por favor, está mujer está intentando ser cortés contigo, agradécelo.
Hago un mohín. Quizás, mi abuela si tiene razón.
-Lo siento desconocida, no quise ser grocera y agradesco su gentil gesto con esta huérfana.- mi abuela me toma del brazo para ponerme en pie y le dirige una mirada de " lo siento, ya sabes cómo son las adolescentes" a la extraña.
Cuando estamos lo más lejos posible de la pequeña multitud se aclara la garganta y toma aire para hablarme. Me cruzo de brazos preparada para la regañiza que está a punto de darme.
-Edith, mi amor, entiendo por lo que estás pasando, tú perdiste a tu madre pero yo perdí a mi hija, ¿entiendes? no eres la única con el corazón destrozado. Sé que no va a ser fácil de ahora en adelante, pero tu padre se ha ofrecido a quedarse con tu custodia, sabes que el domingo vendrá a recogerte y... - vuelvo a interrumpir-
- Abuela, ya hablamos de esto, no me quiero ir con un hombre que solo lo vi cuando tenía tres años, al que no le importe y... ¡Ni siquiera lo recuerdo! Además, no me quiero alejar de ti, tú estarás sola, no podré irme tranquila pensando que abandone a mi abuela. Vamos Abue, por favor, por favor no me dejes ir con el, no me abandones, eres lo único que me queda... - le ruego al borde de las lagrimas.
Me toma por sorpresa el abrazo de mi abuela, me abraza suave al inicio, le correspondo inmediatamente al sentir cómo se tensa y comienza a jadear y el hipo se apodera de ella. Me siento fatal, la pérdida de mi madre a los 17 años nunca fue una opción en mi plan de vida, a pesar de las constantes discusiones con ella jamás quise que le pasara algo malo. Su muerte lenta y dolorosa me fue lo mismo para mí. Agonizante fue el tener que verla sufrir, el no poder hacer nada para calmarla me estaba carcomiendo. Recuerdo su leve apretón -el último que me dio- era tan frío y débil que apenas y lo percibí, su voz ronca a causa de la enfermedad... No puedo continuar pensando en eso así que me limito a sentir el quizás último momento tan cercano con mi abuela, mañana será otro día. Otro día sola. Otro día sola con mi dolor.