24 de Marzo, 2016

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Querido Diario,

Todo iba bien en nuestra corta semana de descanso en el Campamento Jupiter hasta que lo volví a incendiar y esta vez un malvado espíritu no estaba controlando mi voluntad.

Sucedió en la noche cuando trataba de impresionar a unas chicas romanas con un acto de malabares; estaban estupefactas y eso me emocionó asi que ¿por qué no demostrarles el talento del gran Leo? Prendí con fuego las pelotas y seguí con el show. Las muchachas disfrutaban del espectáculo hasta que cierto demonio, digo chica, digo Calypso, apareció de repente y empezó a gritarme "¿Qué crees que estás haciendo con esas chicas? ¡Soy tu novia!" La verdad aquel comentario me impresionó tanto que solté las pelotas, creía que ya no quería volverme a ver y que ya todo estaba acabado pero vino como una novia celosa y...

Olía a quemado.

El cesped se estaba quemando y todos los semidioses desalojaron el área dejandome aislado, yo y mi pequeño gran incendio -suena al título de un libro-, hasta que llegó Aquaman y apagó todo con agua de una fuente, incluso me dejó empapado "para prevenir".

El daño no fue tan grave pero aún así Reyna me dio una paliza.


El Diario de Leo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora