1ra Plegaria

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Hello, este es mi primer fic publicado... de hecho ya lo había publicado en otra página le realice unas pequeñísimas modificaciones y quise compartirlo aquí

Debido a la constante frustración de algunos autores que nos hacen sufrir y no nos muestran lo que queremos. Así que toca ingeniárselas.

Además, hay muy pocos fics de yatori, increíblemente hay más del tipo yaoi (no me gusta es yaoi), respeto a los que leen.

Noragami le pertenece Adachi Toka

Si solo has visto el anime y no has leído el manga ... bueno léelo bajo tu propio riesgo

Tomando de referencia, capitulo 44 del manga de Noragami

Después de la visita a su padre, un Dios desesperado llego a la casa de Hiyori reclamando el haber ido a Capyperland con Fujisaki; haciéndole recordar con desagrado aquella escena, mostrando su cara de asco al pasar por su mente el robo de su primer beso; pero ella ágilmente busco las pruebas contundentes suministradas por arte de Kofuku cuando él le robo un beso a Bishamon.

Después al calmarse, el baja su cabeza y pide disculpas.

- ¿Porque siempre te causo problemas? -

Ella nota el arrepentido rostro del joven Dios, descubriendo la debilidad del que alguna vez fue Magatsukami el Dios de la Calamidad uno de los Dioses más crueles de la historia.

Tontamente trata de cubrir el rubor de su cara al saber que El, ¡un Dios! ¡¡su Dios!! haría todo por ella y cuanto él se preocupa por su bienestar.

Trata de secar torpemente su cabello, dándole la espalda al joven dios y respirando profundo le brinda unas pocas palabras de consuelo, exhalando suavemente algo que no pasa desapercibido por los ojos azules dirigiendo su mirada a sus hermosos y brillantes labios rosados.

Aun ruborizada por la situación ella voltea involuntariamente y dice.

- Ten más confianza en ti mismo -

El rostro del Dios se cubre completamente de rojo al ser descubierto admirando sus bellos labios, su hermoso y húmedo cuerpo; el prohibido cuerpo de una diosa de ojos rosados. El calor en su cuerpo le exige a gritos que la reclame como suya, al final "Los actos de un Dios son justos". Pero recuerda los consejos de su joven y sabia regalía bendita lo cual hace contenerse precariamente; tan solo sus manos cubren su rostro ocultando su condición; solo musito torpes palabras de su boca

- ten cuidado con Fujisaki, aléjate de él y... - pensando nuevamente en su precaria condición al ver tan tentadora escena, una fuerte, dulce y hermosa diosa cubierta por un pequeño, diminuto y frágil velo el cual el poderoso Dios se puede deshacer sin problemas solo para poder probar y tocar ese dulce fruto con sus habilidosas manos, aquellas que temblorosas ocultan su rostro para no dejar libre la lujuria de un pervertido Dios.

Nuevamente susurra

- Hiyori estas bajando la guardia - , ella no puede ocultar su recién adquirida vergüenza e inmediatamente lanza un golpe al Dios; torpemente cae sobre el al enredarse en la toalla con la cual ella ocultaba su sonrojo.

Yato la abraza fuertemente para evitar su caída, sintiendo el blando pecho contra el suyo, por todos los Dioses como quisiera que no hubiese tela entre él y ella para poder sentir la suavidad de su piel.

Baja su rostro enrojecido para observar si se encuentra bien pero su vista es entorpecida por una suave cola.

- Cierra los ojos - dice ella con una voz suave y avergonzada.

El vuelve en si al darse cuenta de la situación en la que se encontraba. Sus manos, aquellas manos que hace mucho tiempo estuviesen manchadas de sangre y que él ha estado tratando de limpiar por siglos ahora estaban tocando la piel desnuda de una hermosa Diosa humanada. Quien era el para tocar tan hermoso manjar, aquellas manos por voluntad propia bajaron un poco más para explorar lo que no creían posible, escuchando una suave exhalación de esos hermosos labios rosas que hace segundos lo hicieron perder internamente la razón.

Él sabía que estaba en su forma ayakashi su cola suave y tibia estaban cubriendo sus ojos; sus traviesas manos querían descubrir más de esa suave piel de seda, llego a la base de la cola y nuevamente sintió esa suave exhalación, un pequeño gemido de placer. "Los actos de un Dios son justos", recorrió suavemente por su espalda para llegar arriba, se podía sentir cuando la piel de su diosa se erizaba con el suave tacto; llego hasta su nuca la agarro fuertemente esperando que ella se resistiese ante aquel acto del Dios, sintiese que aquella mullida cola suavemente descubrió sus ojos encontrando a una diosa con sus hermosos ojos rosas cerrados y unos hermosos labios rosas levemente hinchados reclamando desesperados el unirse vigorosamente a los suyos.

Espero sea de su agrado, ASAP publicare la continuación muy pronto

Have a nice day

Los actos de un Dios son justosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora