Más que ayer, pero menos que mañana [EDITANDO]

Capítulo 56: Mejor Amigo.

Capítulo 56: Mejor Amigo.

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El haber tomado la decisión de haberme mudado temporalmente con los hermanos Alessandri, había sido uno de las más divertidas e idiotas ideas que había tenido. O que recuerdo haber tenido.

Damián era un idiota sarcástico en todo momento mientras que su hermano, el chico de mirada penetrante, era un chico educado y serio que nunca dejaba de hacerme sonrojar con sus halagos.

Damián había arreglado un cuarto -que era de los más grandes de su gigantesca casa- para que yo me sintiera cómoda en el y tuviera todas mis cosas disponibles y accesibles.

Y aunque despertarme, con él enfrente mio picándome las mejillas y diciéndome nomo embarazado no era la mejor de las cosas, me encantaba lo caballeroso que aveces era con ciertos detalles. Como siempre llevarme un vaso de agua fría en las mañanas, o sacar la silla del comedor para que yo me sentará, o siempre permitir que yo pasara una puerta antes que él.

Eran cosas tan sencillas, pero tiernas y que provocaban que se me resolviera el estomago.

Cathe se había disculpado por no haber ido por mi, y me había comentado que últimamente no estaba muy bien ha que tenia problemas con Taylor.

Pero eso casi no importaba.

Aunque siempre me encantaba pasar tiempo con Cathe, comprendía que aveces era mejor darle su espacio y no meterme en sus problemas personales. Y aparte de que estaba Damián para entretenerme.

- Seria bueno que adornáramos la habitación con un poco de rosa, ¿o no?

- Damián, - lo miré -. Sólo estaré aquí unos días más y ya. Scott y Jordán están arreglando mi departamento nuevo.

- ¿Y quien te mantendrá? Ya no puedes trabajar, Fiera.

- Jordan me apoyará con eso.

- Podrías quedarte aquí - rodó por la alfombra y puso su cabeza en mi panza -. Yo y mi hermano te cuidaríamos. Las cuidaríamos.

- No lo dudo - sonreí y pasé mi mano por su cabello oscuro -. Pero tampoco quiero ser una carga. Tú no trabajas. Seria una carga para tu hermano.

- Mi hermano te adora y mantenemos la casa con una pensión de la familia, no con lo que él gana - se encogió de hombros -. Y si quieres que trabaje...

- ¿Porque quieres que me quede, Damián?

- Eres mi mejor amiga, Fiera - se acercó hasta que su rostro estaba a centímetros del mio -. Te quiero mucho y me gusta mucho tu compañía.

- ¿Y sólo eso? - alcé una ceja.

- ¿Crees que me gustas, Fiera? - sonrió con insuficiencia y yo rodé los ojos. Jamás admitiría tal cosa.

- Claro que no.

- ¿Segura?

- Eres como mi hermano. - él me observó y yo sonreí -. No podría verte como otra cosa.