¡Quien diria que tan pronto!

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Soy de enfadarme rápido eso no lo voy a negar, pero esta ya era la gota que colma el vaso. Cuando me enfado suelo decir más cosas de las que siento y por ello, muchas veces, se me va la boca pero puedo asegurar y aseguró, que de las palabras que voy a decir no me pienso arrepentir.
-¡AIMAR! ¿Pero qué haces? ¿que es esto? Acaso crees que yo voy tirando tu ropa interior por ahí con mis amigas, ten un poco de respeto- le voy diciendo mientras recojo mis cosas y le busco con la mirada- ¡Aimar sal aquí!-No obtengo ninguna respuesta y eso me cabrea más, mucho más.- ¡Aimar! definitivamente cada día me das más pena- digo alzando un poco más la voz, me acerco a la cocina donde creo encontrarlo, pero tampoco está allí, aun así al salir miro a la nevera y veo una nota, por lo menos ha dejado una nota.
"Ya que, sé que cuando llegues vas a gritar por el escándalo, me piro y no esperes verme antes de irte"
Dios, es un crío, un maldito crío.
Subo a mi habitación y me doy una ducha, me quito la ropa que está un poco sudada y la echó al cesto de la ropa sucia. Me echó el agua por el cuerpo y eso me relaja un poco. Termino de ducharme salgo y salgo de la habitación en toalla, necesito vestirme porque faltan 2 horas para mí quedada con Axel.
"Rin Rin"
Oigo el sonido de mi móvil que si no recuerdo mal lo he dejado encima de la mesa de la cocina, bajo y lo cojo, veo el nombre de Axel junto con su foto y sonrío.
-¿Me abres la puerta de tu casa?
-Pero, pero... si estoy en toalla, no estoy lista tengo, o sea, necesito tiempo para vestirme
-Abre anda
Es el mejor, sé que es el mejor de todos, el más cariñoso pero sin pasarse, maduro y divertido. Me encanta, la primera que la vi nunca pensé que llegaríamos a esto.
Me acerco a la puerta y la abro un poco solo, ya que al estar en toalla no quiero que nadie me vea, solo el.
-podrías venir así siempre que quedamos...- me dice con una sonrisa que enamora, que me enamora cada día más. Me río.
Subo a mi habitación y él me sigue, no creo que me deba seguir pero me sigue. Cuando estamos en la habitación me suelta un:
-No puedo esperar.- me dice acercándose a mí por detrás y agarrando me de la cintura pegándome contra él- no puedo esperar- me repite al oído mientras baja su mano por mi espalda metiéndola debajo de mi toalla.- te quiero, a pesar de todo.- me susurra y me empieza a subir la temperatura.
-Yo también te quiero.- le digo y me da la vuelta, me coge las manos y me las quita de la toalla, la toalla se cae al suelo y yo estoy completamente desnuda, completamente. Se quita la camiseta y pasa su mano por mi abdomen. No sé por qué pero me siento un poco incomoda, aún que en realidad es lo que llevo queriendo hace mucho.
-¿Quieres?.- me dice bajando su mano, asiento y me tira a la cama.
Al principio me dolía, mucho pero a medida que pasaba el tiempo...
Cuando terminamos, me siento cansada, destiendo mi cama y nos metemos en ella, nos tumbamos y nos quedamos dormidos.
Es el amor de mi vida.

180º, ni nada + ni nada -Donde viven las historias. Descúbrelo ahora