Querido Solace

25

Will se sentó en la cama con todas las cartas alrededor. Sus hermanos no estaban, así que aprovecho ese momento.

Releyó cada carta, buscando pistas. Creía saber quien era, pero no estaba seguro. La idea le parecía un poco rara, ¿Esa persona escribiéndole cartas?

Solo podía preguntarle a alguien.

-¡LOU ELLEN!- Iba gritando por todos lados, hasta que ella apareció.

-¿Que pasa?- Preguntó Lou, un poco preocupada.

-Tengo que preguntarte algo.

-¿Si?

-¿Podemos ir a otro lado? Acá nos miran todos.

-Donde quieras.

Will la llevó hasta un claro del bosque, bastante lejos como para que nadie los escuche pero cerca para no perderse al regreso (Will no se ubica muy bien).

-Entonces, ¿Que querías decirme, Will?

-Es sobre las cartas.

-¿Que paso?

-28 de diciembre.

-¿Q-Que pasó con esa fecha?- dijo tartamudeando una sonrojada Lou.

-¿Debajo de que ventana?

La cara de Lou era mágica. Mezcla de duda, miedo, vergüenza y felicidad.

-No se de lo que hablas, Will.

-Lou, no te hagas.

-No me acuerdo.

-¡Aja! No lo desmentís. Te quemaste sola, Lou.

-Ni sueñes con que te diga algo si seguís así.

-Perdón. ¿Me decís?

-No.

-Porfis.

-No.

-Si me decís no le digo a todo el mundo que decís odiar a Nicky Minaj pero bailas "Anaconda" frente al espejo.

-No lo harías.

-Pruebame.

-¿En que momento esto se volvió una película?

-Decime.

-¿Prometes no decirle a nadie?

-Te lo juro.

-Si mal no recuerdo, fue abajo de la cabaña de Had...

No pudo terminar porque un Will todo sonrojado salió corriendo de ahí, gritando "¡Gracias!" y tropezándose con los demás, dejando a Lou preguntándose como hizo Will para saber su secreto.