Capítulo 9. "Come As You Are"

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Dos semanas, Louis no visitó.

Él era el único en su lista de visitantes, además de su abogado.

Que le den.

El oficial encargado de despertar a los reclusos ya había empezado a golpear las rejas con el bolillo. Pero él no quería despertar, no quería despertar nunca.

Ya se estaba acostumbrando a la comida de mierda, a las duchas públicas y a los matones que no disimulaban en verle el culo en éstas. "Voy a hacerte mi perra, Malik." Era de los susurros menos obscenos que le habían dedicado. Pero ya no tenía miedo, ya le daba igual.

Tal vez su destino siempre era morir, no importa las decisiones que tomase.

Sin ganas, se sentó al borde del colchón cuando el oficial golpeaba con saña la reja de su celda.

"Malditos desperdicios" Susurró cuando los vio a ambos levantados y con la cama hecha. Pero a Zayn ya no le importaba los insultos de nadie, como en sus primeros días, cuando luchó por llegar hasta la oficina del bienestar de reclusos cuando una oficial lo había llamado "escoria". No sirvió de nada. Ahora lo entendía, que por más de los muchos carteles pegados acerca de derechos y prevenciones contra el suicidio, la prisión era lo más parecido al famoso purgatorio, donde lo único que se puede esperar es la muerte.

Empezó con sus ejercicios matutinos, un par de flexiones, abdominales y lagartijas. En realidad no era para mantenerse en forma, sino que era la única manera de evitar los baños concurridos de maricones con esteroides sin que los oficiales lo molestaran. Su compañero, al contrario que él, era un tipo raquítico de unos cincuenta años sin un solo pelo en su cabeza, pero con una cicatriz bastante intimidante encima de la ceja. Alguna vez había escuchado en el patio que se la hizo un guardia luego de apuñalar a un recluso con botella de Coca Cola en pedazos. Nadie sabe por qué lo hizo, ni por qué no lo tienen en máxima seguridad, y tampoco tenían los cojones suficientes para preguntarle o para meterse con él. Se traqueó los dedos de las manos, la espalda y el cuello, antes de coger una toalla y desaparecer. El moreno terminó de hacer ejercicio y se dispuso a leer escondido detrás del camarote para evitar toda palabra de cualquiera que pasara por su celda.

"El baño del segundo piso está desocupado." Escuchó media hora después

"Gracias" Por lo menos, su compañero de celda no tenía en mente violación o asesinato.

Zayn salió cautelosamente de su escondite y se dirigió a la ducha sin ser visto. Honestamente, toda su rutina la hacía discretamente, no por miedo, era más como un instinto de supervivencia. Si nadie lo veía, nadie se metería con él, y si no tenía problemas tal vez se apiadaran de él y lo mataran de una vez por todas. Comer, trabajar, estudiar y asistir a grupos de apoyo, todo era una maldita rutina infernal, y lo estaba consumiendo.

"Su abogado está acá" Le dijo un oficial cuando miraba un programa basura en la televisión. Con un suspiro, el moreno lo siguió hasta la sala de visitas.

"Keith" Murmuró en forma de saludo

"Hola Zayn, ¿Cómo estás?"

"Esperando."

El hombre asintió y sacó unos papeles de su maletín. En realidad no era un mal tipo, solo era un mal, pero muy mal abogado.

"Tu juicio está programado para el 22 de Agosto , casi un mes, ¿Ya estás listo para eso?"

"Si."

"¿Nervioso?"

"No, Keith. Estoy demasiado emocionado por escuchar el día en el que me matarán, la mayoría de gente no tiene ese privilegio, ¿Sabes?"

"Lo siento. Sé que esto debe ser duro para ti, pero entiende que no pude hacer mucho. Sólo soy un abogado del estado y tus antecedentes solos te daban hasta para cincuenta años de cárcel..."

"Esos antecedentes no eran míos. Alguien compró archivos, alguien compró testigos y calló jueces..."

"Pero fuiste tu quien mató al intendente de la ciudad. Basta Zayn, sabes que lo tienes merecido ¿Por qué tuviste que meterte con uno de los políticos más apoyados de éste país?"

"¡No sabía que era importante! Y yo no quería matarlo."

"Está bien. Siempre discutimos lo mismo, mejor cuéntame, ¿Has tenido alguna visita?"

"No." Luego recordó al chico con ojos de cachorro que se había asustado con tan sólo verlo y que había hecho que su sangre ardiera en rabia. "Sólo ayer, al pijo que tu me mandaste."

"¿No ha venido hoy?" Zayn negó. "Se supone que debería venir todos los días."

"¿Qué cojones intentas? Ya me tengo a mi mismo para psicoanalizarme y darme lástima, no necesito a nadie más."

"No, él no viene a eso"

"¿Entonces a qué? ¿Me puedes explicar que tiene que ver conmigo? ¿Por qué debería venir todos los días?"

"¿Sabes de qué universidad viene?"

"Lo dijo, pero no lo recuerdo. Empezaba con Ca..."

"Cardiff. ¿Sabes qué tiene de especial ésta universidad?"

"¿Qué hace pagar una millonada de libras y que usan uniforme?"

"No. Ésa universidad es conocida porque la facultad de psicología y la de derecho están muy ligadas. Los psicólogos ven jurisprudencia cinco semestres, y los abogados psicología."

"Y..."

"Y que éste tipo, es el mejor alumno de la facultad de psicología, entonces sabe bastante más derecho que yo, y que probablemente, sea parte de la orden de practica de jurisprudencia de la universidad, o tenga conocidos allí. Y casualmente, se interesó en ti para desarrollar su tesis."

"¿Y yo que puedo hacer?"

"Piensa, Zayn. Si te llevas bien con él te llevas bien con toda una orden de abogados encantados de tomar un caso tan difícil, sólo por diversión y prestigio de la universidad. No digo que te vayan a sacar de la cárcel, pero por lo menos pueden anular la pena de muerte."

"Está diciendo que si me hago amigo de éste pendejito, ¿Va a salvar mi vida?"

"Probablemente."

"Después de todo no eres tan mal abogado, Keith." El aludido rió. "¿Cómo me dijiste que se llamaba?"

"Payne. Liam Payne." Dijo al tiempo que le mostraba una foto sacada también del maletín. Zayn la miró atentamente mientras se fijaba en sus ojos achinados y su sonrisa de modelo, se veía muy feliz y alivanado.


Muy bien Liam Payne, que empiece el juego.

N.A. 

Perdonen por actualizar cada año, gracias por seguir leyendo.



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