» 42

122K 7.2K 4K
                                    

Puedes seguirme en twitter: @milanolivar 😁🤍


Lauren's POV

La luz del día entraba por la ventana con fuerza, reflejándose en las sillas y aquellas personas que estaban sentadas en el centro de la sala; como yo. Vi a Camila, me dijo que todo estaría bien, que todo estaba bien. También me preguntó cómo lo estaba llevando; le dije que me iba acostumbrando, y en sus ojos vi un atisbo de tristeza. Me apenó saber que le daba lástima que yo estuviese allí.

Al parecer la doctora Sullivan también trabajaba en el hospital, era agradable ver a alguien a quien conocía de fuera, se me hacía menos extraño estar allí encerrada, parecía que el mundo exterior no estaba tan lejos.

—Chicos, hoy vamos a seguir con nuestro taller de pintura y manualidades, ¿os parece bien? —Me parecía genial, retorcía mis dedos con nerviosismo mirando las caras de mis compañeros algo nerviosa. No conocía a ninguno. La doctora Sullivan dice que llegué a un punto en el que ya no era yo, y el que casi muriese reinició mi cerebro pero una forma terrible. Porque tuve que aprender a hablar de nuevo, a andar, y mis manos aún se veían torpes.

Las mesas eran de colores, parecían salpicones de pintura y era bastante divertido. Los colores me hacían recordar el estuche de pinturas de mi tía Elizabeth, ¿qué habría sido de ellos? Espero que mis padres no los tirasen, aunque no me sorprendería mucho. Camila dijo que mis padres querían entrar a verme y que estaban muy preocupados de que hubiese muerto, pero lo que ellos no sabían era que en realidad su hija sí que había muerto en esa bañera.

—¿Qué vas a hacer? —La doctora Sullivan se colocó a mi lado en la mesa, mientras yo apilaba las pinturas a mi lado de la mesa.

—No sé. —Respondí encogiéndome de hombros. Cogí un pincel y lo miré, notando que mi mano lo temblaba, lo sujetaba firme.

—¿No sabes lo que vas a pintar? —Negué cogiendo el trozo de papel enorme que ella me tendía y lo extendí sobre la mesa.

—Nunca sé lo que voy a pintar. —Ella se quedó en silencio mientras yo abría las tapas de las pinturas. —Porque nunca sé qué estoy sintiendo.

—¿Qué sentías antes de suicidarte? —Apreté el pincel y solté un suspiro, cerrando los ojos con una mueca.

—Odio. Desesperación. Tristeza. Sufrimiento. —Mojé un poco el pincel en agua y luego tomé óleo negro, comenzando a deslizar el pincel por el papel.

—¿Y miedo? —Paré un momento, pero al instante negué para seguir pintando. —¿Qué pasó cuando la droga y el alcohol hicieron efecto?

—¿Cuándo casi muero? —Pregunté apretando el pincel en el papel para hacer más grueso el trazo. Sullivan asintió. —Lo vi todo negro. Dicen que hay algo al otro lado, y quizás lo hay pero yo no lo vi.

—Estuviste dos minutos en parada. —Asentí escuchando a la doctora, prácticamente estuve muerta dos minutos. Dos minutos en los que mi corazón se paró.

—Estaba negro. Pero creo que... Sí que hay algo al otro lado, sólo que yo no llegué a verlo. ¿Cómo si no iba a saber que estaba todo negro? No es porque siguiese consciente, estuve dos minutos muerta, pero... El alma, o lo que sea que había en mí, existía, estaba ahí. Lo siento, no sé explicarme muy bien. —Seguí moviendo el pincel por encima del papel, haciendo los trazos un poco más finos.

—¿Te gustan los colores? —Asentí con la cabeza, apretando el borde de la mesa para sujetar bien el papel. —¿Y por qué únicamente usas negro y tonos oscuros?

—Porque así me siento. —Me encogí de hombros.

—Usas el negro pero te gustan mucho los colores al verlos, ¿verdad? —Asentí mojando el pincel en pintura negra, mordisqueándome la cara interior de la mejilla. —Si mueres no verás más los colores, no verás el arte, no verás a Camila. —Paré de pintar retirando el pincel, irguiéndome al escuchar a la doctora. —La vida es mucho más que tu familia. Ellos no son nada, Lauren. Tu vida a partir de ahora tienes que ser tú, tú y lo que te de felicidad. ¿Qué te daría felicidad?

coldDonde viven las historias. Descúbrelo ahora