Todo está bien

8 0 0
                                    




-¿Y porqué Lima, eh? -le pregunto mientras me acaricia el pelo con sus manos. -Eso me suena como a limón.-digo y ella se ríe. Me encanta hacerla reír.

-para tu información, Lima también es una Ciudad. -me dice. Estamos acostados en el césped bajo el árbol que está cerca de la casa de Lima. Yo tengo mi cabeza en su regazo mientras ella está recargada en el árbol, acariciando mi pelo.

-Sí, ¿pero porqué? -le pregunto.

-Mi madre fue de vacaciones ahí, y conoció a mi padre en una de las playas de Lima. Ella me cuenta que allá está precioso. Que el clima es cálido y el sonido del océano es hipnotizante. Soy afortunada por tener ese nombre -dice.

-Aquí el afortunado es el nombre, o en este caso la Ciudad -le digo y ella sonríe para luego agacharse y darme un beso.

-¿qué estás tratando de hacerme, Adam? -me gusta cuando usa mi nombre al final de cada oración, como si estuviera regañándome por algo que hice mal.

-Enamorarte, Lima -le respondo con sinceridad. -Aquí la cosa es pareja, si tú me enamoras, tengo que vengarme y hacerlo yo también -le suelto, y ella abre mucho los ojos.

-Estás... ¿Estás enamorado de mí? -me pregunta con nerviosismo. ¿Porqué se sorprende?

-Por supuesto. -le digo esto mirándola a los ojos. Frunce el ceño y yo me confundo -¿qué tiene eso de malo? -le pregunto. Se tarda unos segundos en responder.

-Nada -asegura, sonriendo, pero sé que algo está mal. Se agacha y me susurra en el oído- vas por buen camino -yo sonrío.

-¿quie...? -estoy a punto de preguntarle que si quiere venir a mi casa, pero suena su teléfono. Frunce el ceño y contesta.

-¿sí? -le dicen algo que por lo que veo no le gusta y cuelga.

-¿qué pasa? -le pregunto.

-Nada, solo que mi mamá quiere que vaya a la cena... Sola. -me dice, viendo mi reacción. Yo tomo su mano, sonrío mientras la beso y me levanto.

-No hay problema. ¿Nos vemos el lunes? -quiero que me diga si va a faltar, para hacerlo yo también.  

-Está bien, adiós Adam -me dice, parándose ya lista para irse, pero yo la detengo.

-y tú ¿quién te crees que eres para decir "adiós Adam"? -le digo y ella frunce el ceño. La tomo de la mano acercándola a mi hasta que pocos centímetros nos separan -me merezco una mejor despedida, ¿no crees? -susurro, para después plantarle un suave beso en los labios que la toma desprevenida. Me corresponde el beso y segundos después nos separamos -Mucho mejor -ella rueda los ojos y se va.

-¡Eres un niño! -me grita.

-¡un niño enamorado! -le respondo poniendo mis dos manos en mi boca. Se ríe. Me quedo viendo por donde se fue hasta que ya no veo más que una pequeña silueta de lo que era Lima.

Me trae loco.

Ya ha pasado tiempo desde que Lima aceptó ser mi novia. ¿Cuánto? No lo sé y no me importa, solo me importa el hecho de que se pasa volando.

Desde que aceptó no la he dejado descansar. Pero es que me encanta como es estar con ella. Como si no importara el mundo y solo estuviéramos ella y yo, aceptándonos como somos. No hace falta hablar. Con solo verla me pierdo en un mundo del que no me gustaría salir jamás.

Me voy a mi casa corriendo. Es otra de las cosas que me gusta hacer. Correr. No pienso en nada al hacerlo, y es como si tuviera un propósito para hacerlo, como si fuera a llegar a un lugar especial, y si cierras los ojos, puedes sentir que estás volando, (claro, con cuidado de no chocar).

Como Lima y yo somos "vecinos" (todavía no me acostumbro a la distancia) llego rápido a mi casa.

-Mamá, ya estoy aquí -digo a nadie en especial.

-¿cómo te fue con tu novia? -me pregunta saliendo de la cocina.

-perfecto, pronto la convenceré para venir a conocerte -le digo entrando a la cocina, y oliendo el aroma a espagueti -mmm, ¿eso vamos a cenar? -pregunto.

-Eso vas a tener que cenar tú, yo me iré a trabajar en media hora, y ¿no se te hace un poco pronto para traer a una chica a conocerme? Creía que yo era más especial para ti ya que nunca has traído una chica antes, y vaya que has tenido novias -me dice, cortando lechuga en la mesa. No había notado que traía su uniforme puesto.

-Lima no es como las otras chicas, y....-digo, acercándome a donde está para robarle un beso en la mejilla mientras sigue cortando la lechuga. - Eres la mamá más especial del mundo, no la traería a menos que no fuera importante -le digo, para después agarrar un pedazo de lechuga y metérmelo a la boca. Me gusta comer lechuga sola.

-Aww, mi niño está madurando. Creí que nunca llegaría este día -dice sonriendo y mirándome con ternura.

-okeeey, estaré arriba antes de que te pongas a llorar. Me avisas cuando la cena esté lista -le digo para después irme a mi habitación.

Reviso mi celular, que había dejado en la habitación cuando salí, y veo que tengo un mensaje de Emily.

"Hola, extraño, has desparecido de la faz de la tierra" dice el mensaje y yo sonrío.

Emily ha aceptado mejor que nadie mi relación con Lima, y es extraño porque pensé que le gustaba. Se ha convertido en mi mejor amiga, y en todo este tiempo me ha dado consejos sobre Lima. Harry también se ha adaptado, solo que me hecha una que otra miradita de enojo.

Me enteré de algo por parte de Harry y Henry una vez que las chicas se fueron y nos dejaron solos. Al principio fue incómodo, pero después Harry soltó algo que nos sorprendió.

-estoy enamorado de Sofia -dijo

Henry y yo por primera vez nos unimos y le dimos consejos. Todo parece estar a la perfección.

"Hola Emily. Lo sé, pero he desaparecido con mi persona favorita" le respondo y ella me responde sorprendentemente rápido. Que extraño.

"Yo no te he visto desde el viernes, así que no sé de que hablas" me dice y yo me río.

"Mi otra persona favorita" le respondo.

"Ahh, y ¿cómo les fue? ¿Ya le pediste matrimonio? XD" Me pregunta y yo suelto una carcajada.

"Estuvo perfecto, como siempre. Todavía no, no quiero que su padre me mate" le digo y espero su respuesta, que se tarda esta vez mucho tiempo.

"El padre de Lima está muerto, Adam" me quedo petrificado viendo el teléfono.

"No lo sabía, iré a verla" le respondo y no espero su respuesta.

Hemos hablado hasta del maldito cielo y no me dijo que su papá está muerto, ni de qué murió, ni con quién vive.

Ya estoy a llegando a la puerta de su casa y me paro en seco. No puedo irrumpir en su casa en medio de una cena ¿Qué le voy a decir?

¿Porqué no me has hablado de tu padre muerto? Mala idea. Abortar misión.

Estoy a punto de irme cuando veo algo que me hace detenerme.

Lima está abrazando a un muchacho con fuerza.

~no es nada, de seguro es su primo~ me digo a mi mismo, pero entonces se separan y el muchacho le toma las mejillas con sus manos. No quiero ver lo que pasa a continuación, así que decido interrumpir...

No todos los ángeles están en el cielo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora