Problem Child ➳ j.b

✨Capítulo 16

Al llegar a casa la noche anterior, Jess se acomodó en la habitación de Ashton y no en la de invitados, debido a que yo no había tenido tiempo de arreglarla correctamente, y la de Ash estaba bien. Le había dicho que tenía sábanas limpias, cobijas, toallas y baños. Todo lo necesario, pero aún así dijo "Si no hay otra opción... tendré que dormir en la habitación de tu idiota hermano"

No recordaba que Jess hubiese sido siempre tan despreciativa, pero supongo que antes sólo lo pasaba y no me daba cuenta.

Ahora mismo estábamos en mi habitación, vestidas, maquillándonos.

Jess había insistido en ocupar mi maquillaje sólo por el hecho de que era de grandes marcas. Y ni siquiera demasiado grandes para mí. Era sólo Mac, Too Faced y ese tipo de cosas, pero entendía que ella no los tuviera.

—Bueno... —dije, luego de escuchar los múltiples lamentos de Jess al no tener el mismo maquillaje que yo. —podemos pasar al centro comercial luego y comprarte un par de estos.

Ella levantó la cabeza sonriente y me miró a través de mi espejo con luces alrededor.

—¿Harías eso por mí? —preguntó ilusionada.

—No es que tenga que hacer mucho esfuerzo. —me encogí de hombros.

—Claro, olvidaba que hasta un pelo quemado y partido tuyo vale más que mi casa. —dijo.

—No... yo no me refería a eso.

—Da igual—me interrumpió. —Por la tarde debo ir a casa de Justin. ¿Crees que podrías llevarme? Prometió enseñarme un poco de la cosa... en la que estaba ayer. Ya ni recuerdo el nombre.

—Hablando de Justin, Jess... —llamé su atención. Dejé lo que estaba haciendo y me paré al lado de ella.

Aún me miraba por el espejo, así que comencé a hablar mirándole también.

—No creo que hacerte amiga de Justin traiga un gran beneficio para ti... —comencé. —tú no conoces el tipo de persona que es. Y lo que hace en sus tiempos libres. Él no es un santo o un tipo hogareño como viste ayer.

—Oh, ____. ¿Estás celosa? —preguntó. —Por primera vez en la vida estoy teniendo algo que tú no, y quieres arrebatármelo.

—No es eso, Jess—dije. —Sólo quiero advertirte. Y si estás interesada en él como más que un amigo, te sigo rápidamente que no vayas por ahí. Él no quiere tener una relación con nadie. Usa a las mujeres y es un cochino y pervertido. —imágenes de él consumiendo una línea de cocaína de los pechos de una mujer se me vinieron a la mente. Y casi quise vomitar.

Le vi girarse y mirarme directo a los ojos, ya no más por el espejo.

—¿Sabes qué, _____? Por primera vez seguiré mi instinto. Vine a verte a ti, ¿recuerdas? Eso es lo que haré, pero tampoco puedo quedarme encerrada en tu aburrida casa por siempre. Lo siento, pero debes aceptarlo. —se levantó y me dejó ahí.

Terminé de arreglarme en silencio.

Yo intenté advertirle, pero ella no me hizo caso. Ahora que haga lo que ella quiera.

—¡Oh por Dios, ____!—entró gritando a mi dormitorio. —¡Tus zapatos! ¡Oh por Dios, yo quiero unos iguales! ¿De dónde los conseguiste? ¡Vamos al centro comercial, ahora!

Suspiré y asentí. Sólo esperaba que este día no fuera tan largo.

***

Llegamos al centro comercial, y Jess sabía exactamente a las tiendas que quería entrar. No se paseó por todas como yo esperaría, pero sí se paseó una y otra y otra vez por las tiendas más caras del centro comercial. Y no me molestaba. Tenía el dinero para pagarle sus caprichos, pero a ella parecía interesarle más la marca que el producto.