me desperté por los gritos de mi hermano detrás de la puerta, me puse de pie fui hasta la puerta la abrí y dijo mi hermano:
-hasta que por fin despertó la bella durmiente, anda que sino se va a enojar tu príncipe Damian- dijo mientras daba un sorbo a su tasa de café.
-queras decir el ogro de mi jefe- dije con voz adormilada y ronca.
el se acerco hacia mi y me beso la frente y me dio un abrazo y dijo:
-ese idiota u ogro como tu dices si que esta loco por ti hermanita- dijo abrazando me.
-aja claro lo que tu digas- dije mientras ponía los ojos en blanco.
el me soltó y salió por la puerta de mi habitación.
me metí a la ducha tarde como unos 20 minutos, mientras me duchaba pensaba en todo lo que me había dicho mi hermano, salí y me puse un atuendo con un abrigo
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Ya lista baje, fui a starbooks a tomar me un café y a comer una dona, después me fui a la empresa.
Llegue y salude a la secretaria y me dirigí a mi oficina al entrar vi que James ya había llegado.
Lo salude diciéndole:
-buenos días señor Porton que tal su mañana - dije mostrando le una sonrisa
-buenos días señorita Longuth, pues bien si eso se puede decir ya que anoche le pedí a mi novia que si quería ser mi esposa y me ha dicho que no - dijo con lágrimas en sus ojos.
El no podía estar triste el no podía, solté me bolso y fui hacia el y lo abraze el me correspondió mi abrazo y dijo:
-encerio la amo, pero ella dijo que lo nuestro nunca iba a pasar más aya de un noviazgo, LA AMO, pero ella no -dijo mientras sus lágrimas se deslizaban suavemente por su mejilla.
El se secó las lágrimas, se despegó de mi y continuó leyendo los documentos.
Yo solo tome mi bolso y me fui a mi escritorio, saque mi laptop y me puse a escribir el libro que no había acabado. Pero había un problema con mi libro, no encontraba un final que me agrada se por completo.
-es bueno o por lo menos lo que llevas escrito - dijo James detrás de mi.
-se que es bueno, pero no se, no he encontrado ese final que me enamore, que me haga sentir satisfecha, que tenga grabado con letras de oro "final feliz"- dije moviendo las manos con desesperación.
-tranquila tu final va a llegar, si yo estoy bien, tu estas bien. - dijo mostrando me una sonrisa y diciendo lo con voz suave.
-gracias - dije con voz suave.
Seré mi laptop y me puse a revisar unos documentos que tenía en mi escritorio y vi que había uno que decía que querían que fuera organizadora de la feria de el libro en la biblioteca del centro.
Me acerqué a James y le dije:
-oye James sabias sobre esto?- dije mostrando le el documento
-sobre que? - dijo mirando me.
Le extendí el documento y el lo tomo y volteo a verme después que lo leyó y dijo:
-es increíble que te hayan elegido para esto -dijo con una sonrisa de gato de Alicia en el país de las maravillas.
Yo solo le sonrei y el me asintió la cabeza.
Yo no lo podía creer lo, así que me dirigí a la oficina de mi jefe.
Llegue y tocó la puerta se oye un pase de su parte, entró y me lo encuentro recargado en el vidrio que daba a la gran ciudad.
El se volteo y sus ojos se conectaron con los mios, el era realmente guapo y me atraía.
El se acercó hasta donde yo estaba y se me quedó mirando yo sólo desvíe la mirada y el dijo:
-porque? - pregunto.
Yo solo me le quede viendo y dije:
-porque que? - dije mostrando le una sonrisa.
- porque rayos eres tan perfecta, tan tu, y porque me atraes tanto, Dios! Eres hermosa. - dijo mirando mis ojos pero su vista bajo a mis labios.
Yo estaba estática en mi lugar no sabía que hacer o que decir, de lo que estaba segura era que estaba más roja que un tomate.
El se fue acercando cada vez más, hasta llegar a rosar nuestros labios el dijo:
-dejame besarte por favor muero por probar tus labios. -dijo en voz ronca.
Yo solo acenti suavemente.
El se acercó y beso mis labios, sus labios eran suaves y cálidos se sentían tan bien, era un beso desesperado pero después se volvió lento y con ¿amor?.
Yo envolví mis manos alrededor de su cuello mientras jugaba con su cabello, el me tomó de la cintura y me pegó más a él.
Nos tuvimos que separar por falta del aire el se me quedó viendo y dijo:
-ah tus labios saben a gloria. - dijo juntando nuestras frentes sin dejar de agarar mi cintura.
- igual que los tuyos Damian - dije mostrando le una sonrisa.
El río y dijo: -dejame invitar te a cenar y no voy a aceptar un no por respuesta - mientras acariciaba suavemente mi cintura sentía como una corriente eléctrica corría por mi columna.
-esta bien pero cuando? - dije mirando lo aún sin separarnos.
-que te parece mañana Samantha - dijo ahora tomando una mano mia mientras la entrelazaba.
-mañana no puedo señ... Damian - dije mirando lo a los ojos.
- y el viernes te parece bien -dijo acariciando mi mano y mirando las entrelazadas y como encajaban a la perfección es como si hubieran hecho la una para la otra.
-claro que si usted perdón, tu me dices dónde, no? Y a que hora?-
-claro yo te digo - dijo para después volver me a besar.
Dios!! Me iva a volver adicta a sus labios eran magníficos.
Ya había acabado la jornada de trabajo así que me dirigí al gym a relajarme un rato.
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Estaba en el gym cuando sale en la tv del gym que "El señor Damian Stivenson el dueño de la editorial más famosa en Londres y toda Gran Bretaña ya se había salido de la lista de los hombres más codiciados de toda Europa y que el Señor Stivenson había dicho en la rueda de prensa de hoy que el ya tenía novia y que quien era esa afortunada señorita".
Yo solo lo ignore y seguí entrenando al fin y al cabo sólo había sido un beso lo que habíamos tenido no había pasado más aya que sólo un simple beso o por lo menos eso esperaba.
Estuve una hora en el gym, me fui a mi casa y ahí estaba mi hermano pero había otro automóvil así que pensé que era su novia, no le presté atención cuando entre, deje mis llaves en la sala y me fui a mi habitación a según escribir pero caí en los brazos de Morfeo.
