Enigma

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"Está vivo..."

Clint juró que los latidos de su corazón se detuvieron por un instante, dando paso después a un retumbar que incrementó hasta volverse una taquicardia, la suave voz de J.A.R.V.I.S. ahora en el cuerpo de Visión, se notaba serena, impasible como si fuera conocedor de aquello desde un principio.

La piel se le erizó y su sistema iba a mil por hora. ¿Acaso en su inconsciencia le había escuchado? ¿Sintió la dulce caricia que le brindó antes junto a su despedida? ¿Sería capaz de responder a su pregunta cuándo despertara? Las preguntas bombardearon su interior como si la guerra no hubiese terminado. Sin embargo, no lograba prestarles atención.

"Su pulso es muy débil pero aún lo percibo, entró en un estado de coma, por eso no puedes ver sus pensamientos, Wanda."

Se olvidó del dolor en su costado, de la hemorragia que pronto se vendría si seguía moviéndose tan rápido, esquivando gente, equipo médico y hasta un perro que abordó al bote salvavidas, cualquier cosa que estuviera en su camino, la ignoraría, porque, ahora sólo importaba auxiliar a Pietro.

"¡Un doctor!"

Rápidamente un rescatista se acercó seguido de otros dos y una enfermera que se encargó de suturar su herida, mientras él observaba como cargaban al muchacho en una camilla y lo trasladaban al interior del helicarrier, su gemela lloraba caminando tras ellos, con el protector brazo del androide sobre sus hombros. La mujer al terminar de vendarle le tendió un par de pastillas y ordenó las tomara de inmediato para calmar el dolor. Lástima que el medicamento no aminorara lo que le gritaban sus pensamientos.

"Si los golpean, regresen el golpe... Si los matan, revivan."

...

Maximoff participó en un proyecto años atrás abandonado por S.H.I.E.L.D. en el que fue encontrado un cuerpo de una raza desconocida, el cual fue estudiado por los mejores científicos de la organización descubriendo que tanto su sangre así como sus tejidos contaban con asombrosas propiedades curativas, decidiendo que lo mejor era experimentar con dichas cualidades en sujetos humanos, dando como resultado mejoría física pero un grave deterioro mental. Las personas sometidas a dicho proceso sufrían de alucinaciones, dibujando bosquejos de lo que parecía una isla, alegando que debían darle caza a seres aclamados como los Inhumanos, no teniendo otro propósito en la vida más que la obligación de acabar con los mismos. Fue así que Fury, quien recién había tomado el mando, ordenó quedara en el olvido donde estaría seguro de manos malvadas como las de H.Y.D.R.A.

Más tarde las circunstancias lo forzaron a desempolvar el proyecto, salvando así la vida de su adorado agente Coulson más no su voluntad. Por lo que luego de meditarlo mucho rato llegó a la alternativa de borrarle la memoria como una solución preventiva a la locura que se lo arrebataba.

Quién diría que Pietro se convertiría en el segundo paciente exitosamente curado.

Al carecer de recuerdos, cada vengador con el que interactuó se vio forzado a charlar cada cierto tiempo con él, exceptuando a su hermana quién claramente no se despegaba de él, entrando de vez en cuando a su mente, compartiéndole las vivencias de su niñez, así como el incidente con los misiles de Stark y su breve alianza con el robot genocida. De todos ellos el que más resaltaba era Hawkeye, quedándose incluso a velar el sueño del muchacho de cabellos blancos, cuidando que las pesadillas no le perturbaran. Debido a que nadie regresa contento de una visita a la muerte.

Los días avanzaban y la existencia del velocista cobraba sentido, al principio le fue duro adaptarse, pasando por las mismas reacciones del agente, temiéndole a cualquiera que se le acercara al punto en el que la vez que Tony acudió a verlo, éste se puso a la defensiva, maldiciéndole en sokoviano, Steve no tuvo de otra que sacarlo de la blanca habitación antes de que el joven recordara la existencia de sus poderes.

MARVEL ONE SHOTSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora