1x1 La Copa Mortal parte 1.

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¡18 años! No todos los días los cumple, ya era legalmente adulta y estaba más que emocionada. Eso hasta que Eric llamo y arruino mi cumpleaños, siempre había sido un idiota, pero ahora tenía el premio nobel a la idiotez ¿Hay premio por eso? Si no es asi deberían inventarlo.

Esa mañana me desperté con una extraña sensación, aparte de cumplir años sentía que ese día iba a ocurrir algo. Luego de los abrazos y besos por parte de mamá ella me entrego una caja de madera con un moño encima.

-Queria dárselas a ti y a tu hermana al mismo tiempo pero Clary salio mientras estaba haciendo unos recado.

Abri la caja encontrándome con una extraña clase de lápiz grueso de metal que en la punta tenia algo parecido al cristal o al diamante.

-¿Qué es? – pregunte observándola con curiosidad, tenia algunos dibujos grabado en metal.

-Es una estela, es... antigua. Me gustaría que estuviera Clary para poder hablar con ambas, esta tarde vengan a casa y tendremos esa conversación.

Mire a mi madre antes de asentir con la cabeza y guardar mi estela dentro de mi bolso. Siempre crei que mi madre no ocultaba cosas, pero tenia el presentimiento de que si.

Luego de almorzar un poco de spagetis de la noche anterior salí de la casa ya que debía ir hasta Java Jones donde siempre nos encontrábamos con Simón, antes de eso pase por Central Park ya que quería respirar aire puro.

Cuando estaba sentada en una banca haciendo bocetos de un niño jugando con una pelota, note que el niño tenía la piel verde, pero en otro parpadeo ya no. Quizás era la luz reflejada en no se qué, o quizás me estaba volviendo loca, sea como sea decidi que era mejor ir al Java Jone aun si Simon no estaba ahí.

Pero mi buen amigo ya estaba sentado escuchando música. Bese su mejilla para llamar su atención y me sente a su lado.

-¡Feliz cumpleaños! – dijo dándome un abrazo con una gran sonrisa - ¿Cambio algo en ti? ¿Ves fantasmas o te sientes adulta? – pregunto bromeando.

-Nop, me siento igual que ayer y que antes de ayer, y como el resto de los días después de ese – sonreí acomodando mi cabello rubio hacia atrás.

Eso era lo único que me diferenciaba de mi hermana gemela. Mi cabello rubio, Clary lo tenia pelirrojo como mamá, pero el mio era igual que el cabello de papá, al menos eso dice mi madre ya que no conocimos a nuestro padre, él murió antes de que naciéramos.

-Es una lastima, hubiera sido genial que despertara con superpoderes.

- Un gran poder conlleva una gran responsabilidad – cite sonriendo.

-Tio Ben, adoro cuando citas a los personajes de historietas.

-No seria una genial chica friki si no lo hiciera, Simon, a la próxima cito al comandante spock "Siempre he sido y siempre sere su amigo" o a Superman "El precio de la grandeza es la responsabilidad".

Pedimos a la mesera dos lattes y un frapuchino ya que Clary estaba por llegar.

-Hay una convención pequeña para jugadores de Dragones y Mazmorras en Paradice Hotel, me preguntabas si querrías ir conmigo.

-¿Por qué no se lo preguntas a Clary? Sabes que dirá que si.

-Lo se, lo se, pero quiero ir contigo – Le sonreí mientras tomaba su mano.

-Claro que si ire, pero con una condición.

-¿Cuál? – me pregunto en un suspiro.

-Que le digas a Clary tus sentimientos por ella.

The Fairchild -ShadowhuntersDonde viven las historias. Descúbrelo ahora