Mi pequeño Steven...

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Música de inspiración...

Horas después...

Mientras que las tres gemas y Steven estaban en la playa dirigiéndose hacia el templo-hogar, Perla estaba detrás del pequeño así que acelero el paso hasta estar alado de el, ella lo miraba y se daba cuenta de que ahora el parecía estar mas alegre que antes, así como solía ser el siempre alegre y atento al momento.

Unos minutos después logran llegar al ya mencionado templo-hogar, al entrar hubo un silencio profundo como debería de ser, Steven entro primero, fue rumbo hacía el Sofá y se sentó en el, en unos minutos decidió recostarse e intentar descansar.

Las otras 3 solo lo quedaban, mientras que Perla lo miraba con una sonrisa al contemplar tal tierna escena así que ella se fue a sentar alado de el y de un momento a otro recogió cuidadosamente a Steven, lo recostó en su regazo y dijo en voz baja.

-"¿No les parece adorable?". pregunto manteniendo su mirada baja hacia donde estaba Steven

-"He he he solo un poco". replico la morada que solo la miraba un tanto extrañada

Garnet parecía estar solo contemplando tal escena así que decidió irse a su habitación dejando a las dos con el pequeño.

-"Mi pequeño Steven te ves tan adorable mientras duermes... ojala entendieras lo mucho que te quiero, lo mucho que te adoro..." -Perla cambio su expresión pasando a ser una de preocupación hasta llegar a ser una mirada triste.

Amatista que estaba sentada a lado de ella solo la miraba aun mas extrañada que antes así que solo se levanto y se dirigió hacia el refrigerador a coger algo para comer luego de esto se fue para su habitación dejando a los dos solos, una alta y pálida Perla junto aun ser híbrido, mitad Humano, mitad Gema.

Perla acariciaba la cabeza de Steven moviendo sus manos por el cabello de este pequeño y ahora indefenso.

"Que adorable eres... Steven..." 

Minutos después Steven estaba empezando a moverse lentamente hasta que puso su mirada hacia donde miraba perla con sus ojos celeste claro, de un momento a otro Steven abrió lentamente sus ojos hasta que los dos se estaban mirando.

"Perla..." -hablo casi susurrando el pequeño híbrido que seguía en la misma posición y decidió empezar a sentarse alado de la pálida que parecía solo fijar su mirada hacia donde fuera el pequeño.

Este se dio cuenta de esto y trato de hablarle.

"¿Perla?"-aun seguía inmóvil mirando al pequeño.

"¿Que es lo que pasa? ¿Acaso tengo algo en la cara dime?" -pregunto algo curioso el pequeño tocándose la cara y tratando de llegar a hacer que su acompañante le responda.

"Solo que... eres hermoso..." -Replico susurrando para si misma.

"Ah... ¿Que dijiste?" -Pregunto el pequeño con intriga.

"¡Nada, olvídalo!" -reclamo sonrojada la pálida apartando su mirada del híbrido.

"Esta bien... iré a comprar rosquillas" -hablo poniéndose de pie y dirigiéndose hacia la puerta.

"Muy bien cuídate... te quiero..." -dijo alegre la pálida acercándose hacia donde estaba Steven cerca de la puerta.

"Yo también te quiero" -hablo alegremente el pequeño abandonando a la alta y pálida Perla.

Esta solo seguía viendo como se alejaba el híbrido, finalmente logro cerrar la puerta y volvió a irse a donde estaba antes lentamente hasta que la puerta del templo se abrió, Perla solo suponía que era Amatista así que solo se sentó en el Sofá, pero se dio cuenta de que Garnet se estaba acercando hacia ella y le pregunto.

"¿Sucede algo Garnet?"

"Solo te vengo a decir que saldré para revisar algo que a mi parecer esta muy mal" -Hablo seriamente la fusión rojiza. 

"Esta bien yo me quedare aquí"

En eso la puerta se abre y sale una Amatista de ella, observa que Garnet estaba con Perla y decide preguntar que pasa.

"¿Que paso aquí?  ¿acaso se murió alguien?" -Pregunto con tono burlón.

Garnet solo se dirigió al portal y dijo unas palabras dirigidas a ambas antes de desaparecer.

"Cuiden a Steven que no le pase nada"

"Bien" -respondieron las dos al unisono.

Y con esto desapareció con la luz del portal, Amatista se dirigió al refrigerador, saca una rebanada de pizza y se la come, al instante se percata de que Steven no estaba y le pregunto sobre el.

"¿Y Steven?"

"Fue por unas rosquillas"

"Entonces te abandono tu amado he he he" -dijo en tono de broma.

"¡CÁLLATE!" -le reclamo a la morada

"Tranquilízate que era una broma"

"Solo lo quiero ver de nuevo al Steven sonriente y alegre que es" -dijo con nostalgia.

"El a estado triste desde que se fue su noviecita connie"

"Ellos no eran novios" -dijo furiosa la pálida.

"¿Quien sabe?, pudieron haberlo sido y el no te dijo" -dijo tratando de molestar a su compañera.

"...Yo quisiera estar a lado de mi Steven... para protegerlo y... amarlo" -hablo cabizbaja mirando el suelo todavía pensativa de lo que acaba de decirle a su compañera.

"Pero..." -continuo. "El nunca se fijaría en alguien como yo... yo una simple... Perla..." -las lagrimas que contenía no pudieron mas y se resbalaron de sus ojos.

"Oh vamos no te pongas mal contigo misma... sabes que el aun es pequeño y se le haría algo raro..." -dijo la morada tratando de que Perla no se pusiera peor.

"Pues... no lo quiero obligar a estar con alguien con la que el no quiere estar..."

"No digas eso de el..."

"Pero es verdad..."

"Sabes que el nos quiere a las tres"

Hubo un silencio profundo como el que hubo al llegar al templo después de lo que ocurrió anteriormente.

"Pero, ¿Que pensaría el de mi?"

"Pensaría que eres maravillosa por todas las cosas que haces, pero... también hay cosas que no le gustan de ti..."

"¿Como que?"

"Pues..."






CONTINUARA...






Ok...

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