"No recuerdo cuanto tiempo pasó desde que tengo a cargo a estos niños.
No recuerdo cuantas lunas pasaron para que el pequeño Sonamu pudiera dormir solo en su cama.
No recuerdo en cuanto tiempo le crecieron los pechos a la mocosa mata flores.
Sólo sé que el tiempo está pasando rápido, y las deudas se tienen que pagar, la buena gente se acaba y las enseñanzas avanzan.
Y algo que tenía muy a mi favor era aquella tan inocente curiosidad que se cargaba Sonamu, era tanta que con tan sólo mencionar una palabra extraña este no dejaba de molestarme hasta saber de que se trataba,quizá para ellos fui una bendición aunque la realidad era otra. Dudo si quiera si saben lo que en realidad soy, no soy un hombre amable mucho menos cariñoso. Ablandarme para que la víctima cayera más rápido es otra cosa muy diferente.-Hey Gugja, descansa la vista un rato-Dijo el mayor mientras se paraba de su asiento dirigiendose a un castaño ya más alto y de buen porte. En sus manos tenía un libro acerca del lenguaje extranjero.
-Te he dicho que no me llames así-Bufó molesto.
-Hey vamos,vamos. ¿Me dirás ahora que no te gusta?
-¿Y tú me dirás lo que tienes detrás de ese velo?
-Chico listo...
-Oye escucha-Cerró el libro mientras se levantaba para luego entregarselo a Bill-Llevo esperando años para que me enseñes a utilizar la espada y no veo que quieras hacerlo-Su cara ahora mismo cambió a la de un niño cuando le niegas un dulce. Tal cual.
-Aún eres joven-Contestó este mientras se guardaba el libro en la manga.
-Ya tengo 17. No creo que sea muy joven aún además me contaste que tú ya sabías desde los 15
-Debo de dejar de dar mi información ya que la usas en mi contra.
-Por favor Bill-Rogó este
-Hey Sonamu... Es muy gracioso ya que hace unos ayeres me llamabas hombre amarillo
-No me recuerdes eso
-¿Y tu hermana niño?
-Quizá en el jardín
-Le fascino ¿no?
-Así es.
Fuera de esa habitación se encontraba una castaña alta, de buen físico oculto por el hanbok color rosa claro, con sus delicadas manos estaba plantando unas muy hermosas rosas a lado de unos elegantes tulipanes. Se pasó la muñeca por la frente con cuidado de no ensuciar su rostro de tierra para retirar las ligeras gotas de sudor que había ahí.
-Sigues dandoles mucha agua Yuseong-Una voz de oyó tras ella seguido de una sombra que la cubría.
-Bill... Hola, supongo que tienes razón-Contestó esta mientras se levantaba.
-Vete a lavar las manos ya son las 14:00 en punto-Dijo este
-¿Comida?
-Así es-La chica salió corriendo a hacer lo indicado por el hombre, desde que tenía la suficiente capacidad para prender el fuego, se había dedicado a cocinar, aunque, no era la mejor en eso despues de todo hacía unas mezclas muy raras de alimentos que por más extrañas que se vieran o sonaran, sabían muy bien.
En un chasquido de dedos, las demás flores que faltaban por plantar, lo hicieron por si solas, Bill miraba tranquilamente todo. No le gustaba eso, la paz para él... Era asquerosa.
Se adentró a la casa, como era de esperarse, Dipper no apartaba el ojo del libro y la chica estaba apurada guisando alguno de sus inventos.-Sonamu-llamó al más jóven
-Dime
-Te enseñaré algo
-Vale...
Bill caminó hacia este y lo jaló para llevarlo afuera.
-Bien, ¿recuerdas la historia del conejo?
-¿Al que le metieron un espíritu?
-Exacto
-¿Qué con eso?
-¿Aceptas?-Extendió su mano de la cual comenzaron a salir flamas azules. Dipper sabía que ese hombre era raro, pero no sabía que tanto.
-Pero... ¿Aceptar qué?
-Será tu primera lección
-Bill yo...
-¿Aceptas?-Repitió nuevamente este.
-Bill...-Cerró los ojos y apretó con fuerza la mano del contrario. Seguido de esto sintió un escalofrío y una corriente helada traspasó todo su ser.
Cayó al piso y miró al cielo, todo se volvía oscuro. Sus ojos se tornaron de un color amarillo y la pupila se vio trasformada en una simple raya negra, se sentía raro.
-Bien Sonamu-Escuchó dentro de su mente
-¿Qué pasa?
-Lo que sucede-Dipper guardó silencio, no se sentía en su cuerpo pero tampoco fuera de este. Prosiguió a pararse, siendo claramente controlado por el espíritu.
-Dipper... Sé tu mismo, no te dejes llevar por mí-Comentó este-Expúlsame
-¿Cómo?
-No te dejes controlar
-Bill
-¡Expúlsame!-Gritó Bill, el castaño asustado, con ganas de llorar y cansado mentalmente no hizo más que comenzar a pensar y pensar. Formular una respuesta, pero... ¿Por qué no primero formularse una pregunta?
Tal como si unas fuertes sogas las hayan desatado de sus muñecas sintió como el rubio se desprendía de su alma.
-Debes aprender a liberar tu alma Dipper-Muy pocas veces lo llamaba así. Y el hecho de que lo hiciera sólo significaba que hablaba en serio.
-¿Pero cómo?
-Eso es algo que sólo tú sabes
-¿Yo?-El rubio sacó nuevamente una espada de su manga como lo habí echo en ocasiones pasadas.
-En fin... Te enseñaré cosas básicas-Contestó desenfundando el arma
-¡¿De verdad?!
-De verdad... Dipper.
Si hubiera seguida más tiempo dentro de tu alma lo más probable es que los dos, hubieramos perdido el juicio."
Bien, pensaba actualizar hasta la otra semana pero pues algo brilló en mi :'v asi que sientanse queridos además de que escribí más de 900 palabras <3
Sjdjjddj espero que les esté gustando porque me matan sus comentarios. Son tan ebjddjdjdk
Y lo sé me salté mucho tiempo pero ps era para que avanzara la trameishon :'v
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Sonamu (EDITANDO)
Fanfiction-Los espíritus malignos los hay en todos lados Pino. -Y usted señor ¿Qué es? -¿Yo?... Soy un "algo".