Painful (Kaworu x Shinji)

Capitulo 5

(¡Disfrutad de la lectura con esta canción! Siento mucho la tardanza, he tenido problemas de salud y de estudios pero aquí lo tenéis, espero que os guste :D)

Gracias por invitarme

No es nada, pensé que sería divertido ver las estrellas... Contigo

Es divertido

¿Eh?

Ahora sé que nací para conocerte

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La fría cápsula que se adentró en el EVA hizo que Kaworu diera un ligero suspiro mientras lo encendía. Una ligera sensación promulgó plenamente en el corazón del albino y mientras comenzaba a moverse, la mente inició una breve sucesión de recuerdos junto con Shinji.

[Flashback + Narración de Kaworu]

Científicamente se podría decir que fui creado por seres egoístas y con finalidades muy crueles para la humanidad, igual que Rei Ayanami. Me gusta más decir que soy un humano capaz de renacer en el mismo cuerpo. Para mi desgracia, ya tenía mi muerte ya escrita por Gendō Ikari, así que cualquier sueño que tuviera, si es que una máquina puede tenerla, eran fatídicamente anuladas.
Los primeros años en el mundo humano fueron los peores para mí: esa cápsula tan pequeña y claustrofóbica, científicos observando cada parte de mi anatomía... Me sentía como una escultura griega en un museo de arte. Tuve que esperar varios meses para comenzar las pruebas de dominio y sincronización con los EVA, no era de esperar que superase los límites que ellos pensaron ante esa máquina, que según para mi, era una máquina que solo traería caos y desgracia.

Rendimiento perfecto, neutralidad psicológica, excelente forma física, gran habilidad en la música... No era mas que un sujeto sin emociones para SEELE y el Proyecto de Complementación Humana. Entrenaba cada día sin falta y cuando nadie me vigilaba, salía del cuartel general y me dirigía a una iglesia en ruinas donde había un piano extrañamente intacto. Mis dedos accionando las teclas sobre la nota correspondiente de Oda a la alegría de Beethoven. El viento agitando mi cabello. El dulce aroma de la hierba recién cortada. Toda esa mezcla de sensaciones hacía que mi corazón se sintiera en paz, como si estuviera flotando sobre la vía láctea mientras veo como pasan a mi alrededor una cascada de estrellas fugaces. Mi humanidad en ese período corto de tiempo era consciente en mi cuerpo.
No recuerdo cuando comencé a sentir emociones humanas, tampoco cuando empecé a sonreír. Pero lo que sí que llegué a saber, a base de libros y de estudiarlos, fue que aquellos ojos azules apresaron a este corazón mecánico.

Recuerdo que conocí a Ikari justo antes de ir a la Luna, unos segundos bastaron para observarle desde lejos para que mi cerebro, alma y corazón dictaran mi destino.

"Si debo morir, quiero que sea por él, por verle sonreír..."

Desde aquel momento y mi muerte, por muchas veces que vuelva a renacer. Siempre le amaría y no me molestaría morir a manos de él.

"Yo seré tu ángel
Yo seré tu guardián
Mis labios uniré a él
Tú, princesa y yo galán"

[Fin del flashback + Narración de Kaworu]

Un sonido repetitivo sacó de la mente a Kaworu.

-¿Batería baja?- Leyó atónito en la pared de control para no acabar del todo con la batería. El albino miró fijamente la pantalla con el aviso y agarró los comandos- No queda mas remedio, tendré que pilotarlo yo mismo-.

Antes de que la batería continuara disminuyendo de manera tan veloz, el albino cambió del piloto automático al piloto manual, accionando al EVA a su plena voluntad. No tardó ni un segundo en ir saltando de roca en roca, acercándose más a la capa de ozono.
Cada vez costaba más mover al EVA y el oxígeno era más escaso dentro de aquel robot, Kaworu mantenía como podía la respiración y poco a poco el sudor se hacia presente en su cuerpo. No iba a llegar muy lejos si esto continuaba así, su única solución fue que con la velocidad de los motores y del efecto de la bajada en picado, al traspasar las capas atmosféricas, podrían llegar a ganar velocidad pero con la consecuencia de la destrucción del EVA y ganar alguna que otra herida, para finalmente accionar la válvula de escape y huir antes del impacto.

Y así hizo nuestro albino, durante la caída, el traje comenzó a arderle y así destrozar una parte de su atuendo junto con unas leves quemaduras en brazos y piernas. No podía evitar soltar algún gruñido de molestia pero a pesar de ello, continuaba mirando el mapa de la pantalla para intentar aterrizar sobre las costas de Japón.

-Ya queda poco... Shinji... ¡Esto no me detendrá!- Al decir eso, Kaworu pudo ver como se acercaba rápidamente al mar rojizo y antes del impacto, el albino accionó la palanca de la válvula de escape pero debido al deterioro del EVA estaba atascado y era casi imposible de mover- ¡Maldición!- gritó Kaworu en un estado de pánico.

Las quemaduras comenzaron a sangrar, alcalzando heridas de segundo grado por el efecto de horno en el interior del EVA. No dejó de intentar accionar la palanca mientras caía en dirección al mar. Pero segundos antes de impactar se logró accionar la palanca y antes de que el EVA se sumergiera bajo el mar rojizo, la capsúla salió volando hacia la costa que había cerca.

Kaworu despertó del golpe que se dio dentro de la cápsula y se acarició la cabeza, segundos después salió de aquel recinto metálico y observó detenidamente a su alrededor: Un extenso terreno de arena rojiza con forma de desierto con escasa vegetación que yacía si vida. Kaworu sonrió y a paso lento, con sangre fluyendo de sus heridas, y con el traje hecho trizas: sin mangas en los brazos y el borde de la tela de los hombros calcinado, la zona del calzado oscurecido y en la zona del torso casi todo desgarrado junto con unos leves rasguños debido al aterrizaje.
La respiración del albino era rápida y agitada. Alrededor del ojo izquierdo apareció una quemadura, pero pese a eso continuó caminando, sin mirar hacía atrás.

-No voy a morir ahora. No ahora que estoy tan cerca de ti- Dijo Kaworu dirigiéndose al cuartel general de Nerv, recordando la promesa de volver a encontrarse con él. El chico de los ojos como el mar.