capitulo 3

2 0 0
                                    

A las 12:45 el señor Stuart aun no hace acto de presencia, lo espere hasta las dos, al ver que no llegaba salía almorzar. Frente a la empresa hay un restaurante muy acogedor pido lo usual arroz con pollo a la salsa Alfredo, con un simple vaso de agua, después del accidente mi metabolismo se descontrolo solo puedo comer ciertas cosas. Degusto lentamente cada porción de mi comida es como comer un pedacito de cielo.

A las tres vuelvo a la oficina, la recepcionista de la tanda vespertina no ha llegado por lo que no se si mi cliente llego, suspiro de frustración me dirijo a mi oficina.

Sentado en mi oficina se encuentra un hombre de espaldas a mí, me aclaro la garganta para llamar su atención, el sujeto aquí voltea a verme. El tambien se aclara la garganta y lo primero que dice es

- señorita tiempo buenas tardes- dijo el señor Stuart porque definitivamente era él y se esmeró en recalcar la palabra tarde.

-disculpe señor Stuart por la tardanza, resulta que lo espere hasta las hasta las dos y como no llegaba Salí a almorzar.

-si sabe que tiene un cliente lo correcto es esperarlo hasta que aparezca no cree.

-no cree usted que al saber que tenía una cita de negocios, lo correcto es aparecer a la hora indicada le dije- no se la hora en Europa pero aquí en san francisco las doce son las doce- dije mirándole fijo a los ojos y por un minuto olvide mi discapacidad.

El por supuesto no se inmuto com ni mirada, fue hasta ahora que note que sus ojos son de un color gris profundo, desvíe la mirada hacia su pelo negro igual que en las fotos aunque un poco más intenso de lo que recuerdo.
Camine lentamente hacia mi escritorio ubicándome en mi silla, el desvió la mirada a mis pies notando mi cojera, volvía aclararme la garganta, el levanto la mirada ligeramente apenado.

-bien en vista de que ha venido empecemos- dijo el todo altanero aun sin admitir que la culpa es de él. -Michael me ha informado que compro una casa en la bahía y necesita unas remodelaciones, acompañado de una fiesta como inauguración de la casa.

-Es correcto señorita...

-leay le aclaro de manera rápida.
- Si señorita leay- repite de manera lenta-necesito todo listo para el 31 de diciembre.

Le mire boca abierta, pero señor apenas estamos a 10 de noviembre la fiesta solo se organizaría en un mes, por todo como mínimo serian dos meses, si así es como Michael lo planeo entonce...

-señorita leay me se cree capaz de realizar tan simple proyecto- simple dice

-no me estoy negando pero porque tengo yo que hacer este trabajo, lexy es perfecta para este proyecto- le planteo suavemente. -pero te quiero a ti, es pero contar con tus servicios makena.

Okey cuando empezamos. Con una sonrisa de satisfacción en su rostro gira sobre sus talones, lo unico que alcance oír fue un mi secretaria se pondrá en contacto contigo.

CincoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora