Match-point - Camren

Capítulo 13

Camila POV

¡Eso no me lo esperaba!

Los labios presionados contra los míos, eran suaves y con un toque de sabor dulce. Muchos pensamientos confusos pasaron por mi cabeza, dejándome en shock; ocasionando que yo no correspondiera el beso.

¡¿Qué carajo está pasando aquí?! ¡Debo estar soñando!

Después de unos segundos, que se sintieron como una eternidad, Keana se separó de mí. Al ver su rostro, pude notar el pánico.

Antes de que yo pudiera reaccionar y decir algo, Keana salió corriendo fuera de la habitación. Yo debía ir tras de ella y hacerle mil preguntas; pero no lo hice. Toda la situación confusa, me dejo plantada en el lugar donde sucedió todo.

Me calmé después de un rato y aclaré un poco mis pensamientos. Decidí esperar el regreso de Keana para hablar. Ella no tenía otro lugar donde dormir y tenía que volver; no lo hizo. Esa noche no dormí, esperándola preocupada.

Ya había amanecido y yo bajé al Lobby, donde nos esperaba nuestro autobús que nos llevaría al aeropuerto. Sólo esperaba que Keana estuviera ahí y que se encontrara bien. Al llegar al Lobby, Chelsea se acercó a mí.

"Camila, ¿crees que Keana se demore mucho? Sólo falta ella"

"¿Ella no está aquí?" La preocupación era evidente en mi rostro, porque a ella podría haberle pasado algo.

"¿Qué?" al parecer, Chelsea notó la expresión en mi rostro. "¿Qué sucedió, Camila?"

"Ella no durmió en la habitación anoche" dije vagamente; no podía explicar lo que sucedió.

"¡Argh! No puedo creer la actitud inmadura de Keana" ella no se veía preocupada.

Chelsea pensaba que Keana no durmió en la habitación anoche por mí; en parte, así fue pero no por la razón que se imaginaba.

"Ashley, ¿Sabes dónde está Keana?" le preguntó a la otra rubia.

"No ¿Por qué?"

"Ella no durmió en su habitación anoche" le informó la entrenadora.

"La entiendo; yo también, preferiría dormir en la calle, antes que compartir habitación con esa lesbiana" dijo Ashley con desprecio, señalándome.

"Eres una..." Estaba a punto de contestarle, cuando noté que Keana venía entrando por la puerta del hotel. "¡Keana!"

Ella enfocó su mirada en mí y la aparto al instante. Sentí un alivio enorme al verla y saber que nada malo le había sucedido. Mire su rostro y pude notar las marcas de escasez de sueño bajo sus ojos.; al parecer, ella tampoco había dormido en toda la noche.

"¡Keana! ¡No puedo creer que seas tan inmadura!" Chelsea mostró enojo. "¡Sube por tus cosas y apresúrate, que perderemos el vuelo por tu culpa!" ordenó y la chica obedeció, sin decir nada.

Tenía ganas de ir tras de ella para hablar, pero sabía que no era un buen momento; tendría que esperar para hacerlo.

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Había pasado una semana desde que Keana me había besado. Días en los que yo trataba de hablar con ella pero se la pasaba huyéndome. Siempre que me veía ir hacia ella, huía al lado opuesto de mi camino. Y en los entrenamientos, no había oportunidad de hablar. Ya ni siquiera me molestaba.

Yo no había tocado el tema con nadie. No debía, hasta saber lo que pasaba con ella.

La única suerte que tuve esa semana, fue no haber visto a Austin por ningún lado. Así que, sólo tenía que soportar los insultos idiotas de Ashley.