Por favor, dime que estoy soñando...
Mis ojos empezaron a cristalizarse.
¿Es una pesadilla? Sí, eso es, ahora me despertaré y voy a olvidar todo esto.
Cerre mis ojos intentando lograr algo que era imposible.
No estaba soñando, efectivamente Niall habia jugado conmigo otra vez. Estaba con Sarah en su habitación en medio de quién sabe qué.
Tal vez no estaban haciendo nada... Tal vez estaba exagerando.
Me agaché a la altura de la cerradura de la puerta y miré por el pequeño orificio.
Ellos ya no hablaban, las manos asquerosas de ambos se tocaban, mientras se besaban.
No aguante mucho más y sali corriendo de alli. Creo que Greg me dijo algo antes de salir, pero lo ignore y segui corriendo.
Zayn y Harry siempre tuvieron razon y yo no los escuche.
Me odie por esto, pasé por la plaza en la que habia llorado por ultima vez, rogando que Zayn apareciera nuevamente.
Me senté en una banqueta y deje caer mis lagrimas.
¿Cómo habia sido tan idiota?
Qué tonta fui al creerme todo lo que Niall me dijo. Pero este es el final, ya no más. Esta vez no habrá segundas oportunidades, esta vez no volveré a caer en sus lindas palabras... No lo haré, no volveré con él... Ya no más...
¿A quién engaño? El idiota sigue en mi cabeza y no me es facil deshacerme de él. Tal vez necesito...
-¿_________?-y como si alguien hubiera escuchado mis ruegos, el apareció.
Zayn estaba corriendo hacia mi. Y al parecer estaba corriendo antes, por lo sudado que estaba-¿_____?-se agacho para estar a mi altura-______ no me asustes...-tomó mi mentón e hizo que lo mirara. Mis lagrimas no cesaron y lo abracé.
-Soy una tonta...-dije entre sollozos
-No eres una tonta-se separo un poco y limpio mis lagrimas- ¿Siempre que te encuentre aquí estaras llorando?- reí sin ganas- Vamos, muestrame esa sonrisa-se sento junto a mi
-Quisiera hacerlo pero no es el momento
-¿Que te hizo esta vez?
-Lo mismo...-suspiré y volví a abrazarlo.
-¿Puedo matarlo esta vez?-dijo muy sereno.
-No lo vale, sólo quedate conmigo.
-¿Quieres un helado?-dijo sonriendo. Asentí. Ambos nos pusimos de pie.
-Mi auto...-recordé y maldije por dentro. No quería volver a la casa de Niall.
-¿Donde esta?-Zayn parecio leer mi mente-No te preocupes, yo lo traeré.
-No, mejor dejalo y vayamos por el helado.
-Como quieras-tomo mi mano y caminamos un par de cuadras hasta llegar a una heladería
.
Compramos nuestros helados y nos sentamos en una mesa que se encontraba al aire libre.
-Supongo que ahora sí se termino-comento comiendo un poco su helado
-Es lo que más quiero-tome una de las frutillas de mi helado-¿Quieres?-le ofrecí.
-¿Por que me la complicas tanto?-dijo un tanto enojado
-No lo estoy haciendo Zayn-me levante de mi silla y camine hacia el para sentarme en sus piernas-¿Quieres?-volvi a preguntar, colocando la fruta en mi boca.
-No, gracias-me quito la frutilla y la dejo en un costado. Acaricio mi mejilla con una mano y con otra rodeo mi cintura para luego besarme en la mejilla-Tu no me quieres...-susurró en mi oido y me hizo a un costado para ponerse de pie-Dame las llaves de tu auto-extendio su mano. Revolvi mi bolso y se las entregue.
-Zayn...-intenté hablar
-No tardare-me dio la espalda y se fue.
El moreno tenia razon en algo, no estaba bien jugar con lo demas. Y es que, cuando quise volver a ser la _______ de antes, nada resulto como lo esperaba.
Yo ya no era la misma, y creo que fue porque antes de Niall no hubo otro, entonces me divertia con cualquiera y no le daba importancia a lo que es tener a alguien al lado que siempre te apoya... Aunque con Niall no era realmente así, bueno, sólo al principio, porque luego se mostro como de verdad era.
La sensacion de tener a alguien para abrazar, besar o simplemente estar, era hermosa. Era algo que me encantaba, al igual que escuchar halagos viniendo de la persona que esta a tu lado...
Los ojos se me cristalizaron al recordar los momentos que viví con el chico que... Que me uso y mintió... dos veces.
Ese chico que pense que era perfecto para mi. Ese chico que debia aceptar, no era para mi y debía olvidar.
-¿Otra vez llorando?-no me había dado cuenta de que Zayn había estacionado a unos metros y estaba esperando a que subiera. Limpie las pocas lágrimas que se me escaparon y subí al asiento del copiloto- No me lo cruze, es un duende suertudo...-comento intentando levantarme el ánimo.
-¿______?-me interrumpió.
-¿Qué?-me despavile y lo mire.
-¿Sigues pensando en el?-preguntó apenado.