¿Qué pierdes?
Nada
¿Qué ganas?
Sexo, besos, caricias... ¿Sentirte consentida?
¿Entonces?
Dejate de vueltas, no pierdes nada con un poco de diversion
Gracias conciencia...
Yo no soy t...
-Bueno...-acepté dudosa. Zayn me extendio su mano. La tome. Comenzamos a bailar una especie de vals, sin música.
Daba pequeños besos en mis oreja y mi cuello. Mi piel no tardo en erizarse. El sólo sonrió. Tomo mi rostro entre sus manos. Rozo apenas mis labios haciendo que deseara apoderarme de sus carnosos labios. Pero me contuve. Me miro fijo durante unos minutos.
Ninguno de los dos decía nada. Sólo me miraba. Rozo su nariz con la mia, haciendo un maldito beso esquimal.
Pero a estas alturas yo ya queria devorarmelo. ¿Mencione que soy calentona? Bueno, sí lo soy, en cualquier sentido que puedas imaginarlo.
Mordió mi labio inferior delicadamente y luego lo soltó.
Ya no podia aguantar; tome su nuca y lo acerque lo más que pude hasta chocar sus labios con los mios y obtener el beso que tanto me estaba haciendo 'antojar', por decirlo de alguna manera.
De vez en cuando Zayn introducía su lengua en mi boca, pero no muy seguido. Seguía manteniendo ese... ¿Ambiente tranquilo? Eso...
Pero yo no podia soportar mucho más, sinceramente no sabía cuanto más podría estar así. Sí, el beso estaba muy lindo y eso pero...
Zayn poso una mano en mi cintura y otra en la parte baja de mi trasero, me llevo hasta la cama y me acomodo en ella.
¡Al fin! Grito la calenturienta en mis fueros internos.
Pero seguía besandome de la misma manera.
Yo me adelante y trate de desabotonar su pantalon pero el detuvo mis manos, enalzandolas con las suyas y colocandolas a ambos costados de mi cuerpo.
Me recompenso profundizando sus besos y jugando con mi lengua.
Me zafé de sus manos e intente deshacerme de mi remera pero también me detuvo.
-¿Qu..-colocó su dedo índice sobre mi boca y me dedique a mirarlo.
Cruzo sus brazos ,coloco sus manos en el borde de su remera y subio lentamente su prenda hasta quitarsela por completo. Sonrió al encontrarme mordiendome el labio mientras me deleitaba con su abdomen perfectamente marcado. Volvió a mis labios.
Acaricie su abdomen y fui bajando hasta su entrepierna. Me detuvo nuevamente y enlazo esa mano con la suya.
Tuve otros intentos fallidos, que terminaban en cualquier lugar, menos en el que yo quería.
-No todo tiene que terminar en la cama-dijo con su respiracion entrecortada
-Estamos en una -le sonreí.
-Tu sabes a lo que me refiero...-me dio un pequeño beso. Se puso de pie
-¿A donde vas?
-Al baño, tengo vejiga chica...¿Donde es?-le apunte la puerta blanca.
¿Y?
¿Y qué?
¿Como estuvo?
Estan en mi cabeza idiotas, tenemos el mismo cuerpo.
