¿Quien eres tu? [1º Parte] Yaoi SasuNaru [Terminada]

Capitulo 47: "Estoy siendo infiel..."

~Viernes~

Kakashi...

La alarma comienza a sonar y yo me muevo entre las sabanas sintiéndome mas cómodo que nunca.

¿¡Porque mierda siempre que la alarma suena encuentro la mejor posición para dormir!? 

Simplemente me haré el que no escucho la alarma... no... Tsunade me vendrá con todo su potencial si ve que llego tarde... AAHH... ¡Solo un día mas Kakashi!... tu puedes... 

- Mmh... -dice una voz a mi lado luego me rodea con sus brazos

Y aquí va... Otra razón mas para quedarme en cama...

- Suéltame... -digo de mala gana- Tengo que ir a trabajar -digo con pereza

- Cinco minutitos mas... -se acurruca mas en mi

- Si me pides cinco minutos mas no podre levantarme después... -digo

- Mmmh... -a mala gana me suelta y se tapa con las sabanas

Me siento en la cama y lo miro

- ¿No tenias que estar temprano hoy en el trabajo? -le digo extrañado

- Cambiaron la reunión para el Lunes... 

- Oh, suertudo... -digo levantándome y yendo hacia el baño

- Por cierto, lindo trasero... -dice para luego darse vuelta y cubrirse entero con la sabana

Lo miro con el ceño fruncido

- No me provoques tan temprano por la mañana mira que no respondo... -sonrío de lado y con un tic en la ceja derecha

- ¿Y que esperas? -dice provocandome

Lo miro durante unos minutos y el se destapa para verme. Frunzo el ceño

- Podrá esperar... voy tarde... -digo metiéndome al baño y cerrando la puerta- ¡Ah!... Y no te salvaras a la noche... 

- ¡Estas loco! -grita- ¡Piensas partirme en dos! -dice con terror

- ¡Ese es tu castigo por provocarme en un momento que no puedo! -me meto bajo el agua

- ¡Lo siento!

- ¡Nada de disculpas aquí! -digo mientras me lavo el pelo y después el cuerpo

Una vez listo miro a Óbito que esta aun en la cama mirándome sonrojado. 

- Nos vemos... -le guiño un ojo y salgo de casa

Llevo 5 años en una relación con Óbito. Recordar el pasado es muy doloroso y difícil para ambos, ya que en el pasado ambos nos odiábamos a morir, bueno... realmente no era odio... era mas que nada ver quien de los dos era el mas fuerte, ambos eramos tercos y no nos dejábamos vencer por el otro y ese fue nuestro gran error