Epilogue

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Escribo esto a las 3:19 AM, me di cuenta que llevaba días sin ponerme a hacer esto y quise terminarlo de una vez por todas. No ha pasado por manos de mi beta, ni de nadie, más que Autocorrector Word y Google Docs, disculpen cualquier error.



Cinco días antes de Navidad.

***

Despertar es difícil.

Son esos pocos momentos de incertidumbre y opacidad cuando los contornos todavía tienen que afinarse y sus ojos luchan para ajustarse y su cabeza está tratando de ponerse al día con su entorno. Son sólo unos pocos segundos, pero suficientemente largos para que el pánico se apodere de su cuerpo y lo haga salir disparado, sus brazos levantándose por reflejo, listo para luchar, el corazón palpitando y la sangre corriendo por sus oídos.

Siempre le toma un rato darse cuenta del edredón agrupado en su regazo, tan suave contra su piel desnuda, y entender en la habitación en la que se encuentra – no vacía, pero sólo escasamente cubierta de muebles, algunas prendas de vestir y pares de zapatos cubriendo el piso. Amplias ventanas y una ciudad bulliciosa y luego lentamente, sólo lentamente, el reloj digital señalando la madrugada en la mesita de noche, la pila de libros de bolsillo, el distante sonido de música filtrándose a través del aire – el cálido pero vacío espacio a su derecha.

La fría y delicada presión de sus placas de identificación contra su esternón.

Su brazo izquierdo quejándose silenciosamente, pero es la mano derecha que se cierra alrededor de las placas y las aprieta fuertemente por un segundo antes de liberarlas en su palma abierta. Los bordes son menos nítidos estos días, suavizados por sus propios dedos trazando las mismas letras una y otra vez, como si su presencia fuera de alguna manera, una validación de su propia existencia.

Louis William Tomlinson, piensa, su nombre clavándose en su pulgar mientras lo presiona contra la placa. Tu nombre es Louis William Tomlinson.

Toma unos momentos para respirar, para calmar su pulso y ordenar sus pensamientos. Su cabeza siempre punza en la mañana y la gente le ha dicho que podría muy bien permanecer de esa manera por un largo tiempo, como su cerebro está reconstruyéndose, literalmente, todo junto de nuevo. Lo hace, y aun así, no hay un día en que despierte y no esté aterrorizado de que todo se haya ido de pronto otra vez. A medida que su mente se apresura por obtener información, por un breve instante todos los días, es agarrado por el absoluto terror. Las placas de identificación ayuda. Son un sólido recordatorio de que no es un producto de su propia imaginación, que no está soñando o congelado, ni ninguna cosa entre medio. Desea no necesitarlas; desea que todo lo demás pudiera ser suficiente.

Hay buenos y malos días.

Días donde puede salir de la cama sin dudar y todo cae en su lugar y se siente fluido y familiar, días donde es perfectamente consciente de sí mismo y su pasado y su presencia y de alguna manera aún se las arregla para funcionar sin problemas. Hay días donde Louis despierta, siempre mirando la puerta, y se gira para encontrar a Harry durmiendo a su lado, su brazo cerrando la brecha entre ellos. Y algunas veces puede quedarse en el mismo lugar por un muy largo tiempo, sintiéndose calmado y descansado y tan cerca de estar feliz tanto como su quebrada cabeza es capaz de estar. En los días buenos, Louis pude estirar una mano y trazar los rasgos de Harry y verlo como poco a poco vuelve en sí, arrugando la nariz y los ojos y chasqueando sus labios y la primera vista de los ojos de Harry lo anclan a una vida que nunca pensó que tendría.

Pero también hay días donde no logra calmarse lo suficiente para ser consciente de las placas colgando alrededor de su cuello. Días cuando la primera cosa que ve es esa monstruosidad reluciente capturando la luz y la única cosa que siente es su peso arrastrándolo un pozo sin fondo; donde todo lo que escucha es un tren abriéndose paso por el valle congelado, un taladro perforando agujeros en su cráneo, la electricidad silbando y quemando su piel. Gritos haciendo eco profundamente en su alma. Tiene días donde despierta y todo lo que puede ver es rojo, sin recordar quién o qué es ni dónde está.

The Dead Of July 》español ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora