FRICTION

Capítulo 12.

Damas y Caballeros, bienvenidos a su fin... 

¿Alguien está listo para lo que viene? Prepárense, porque este día conocerán de que están hechas las Villanas. 

— ¿Perdona? —Ryder separa los brazos, apretando los puños y dando un paso adelante.

— ¿Tu eres el sordo del grupo? —Aaron da otro paso, desafiante.

—Tienes suerte —le dice el chico—, hoy tengo un buen día. Así que dejaré que te marches sin romperte la cara, y olvidaré todo esto —dice lo último mirando a Ronnie.

— ¿Tú, romperme la cara a mí?

—Él, yo, Thomas... —Damon comienza a enfadarse— ¿Te hago un dibujo o lo entendiste?

—Ronnie, largaos de aquí, venga —Ryder prevé lo que pasará si los nuevos no se marchan.

—No pienso irme sin Noah.

—No voy a permitir que te lo lleves —dice Mey.

—No le pondrás un dedo encima —Thomas se coloca junto a Ryder.

—Nadie se llevará a nadie. Antes tendrás que pasar por encima de nosotros —. Damon gruñe, llevando sus brazos a su pecho y cruzandolos en una pose desafiante. Su mirada afilada perforando el rostro del tal Ronnie y su cómplice Aaron. Sus músculos se elevan mediante se cruza de brazos.

—Vaya, vaya —Ronnie sonríe—. Veo que tus putitas se desplazan contigo, Black.

— ¿De qué conoces a Noah? ¿Por qué le buscas? —el tatuado trata de analizar la situación, ignorando las palabras provocadoras del otro. Le conoce bien y sabe lo que busca.

—Su padre me jodió, y mucho. Gracias a él lo perdí todo, así que ahora él también lo hará.

—Bien —Ryder deja escapar una bocanada de aire y cierra los ojos para no perder los nervios—. Abre bien las putas orejas porque no me gusta repetir las cosas, ¿de acuerdo? Date la vuelta y sube tu puto culo a esa moto antes de que te reviente la cabeza. ¿Me he explicado bien?

Aaron mira a Ronnie y después a Ryder de nuevo. Se aproxima un paso, quedando a menos de medio metro del chico tatuado. Ambos chicos, el uno tan alto como el otro, se intimidan entre ellos mientras el resto observa la escena.

—Ryder —Damon se coloca a su altura, viendo que las cosas se descontrolarán pronto.

—Ronnie, llévatelo de aquí —le dice el chico sin apartar los ojos de Aaron.

—Lo siento, amigo, pero creo que no —Ronnie lleva la mano a la parte trasera de su pantalón.

Ryder interpreta ese acto e inmediatamente empuja a Mey contra el sofá y cierra la puerta.

—¿¡Qué demonios está pasando, perra!? —Thomas rebota contra la pared y se agacha imitando a Damon y Ryder.

—Mey, sube de una puta vez —dice entre dientes mirando a la rubia.

— ¡Es de mala educación cerrar la puerta en las narices de la gente, Black! —grita Ronnie desde fuera.

—No me pienso mover de aquí hasta saber qué ocurre y por qué quiere llevarse a Noah.

— ¡Sube arriba de una puta vez! —le grita sacando su arma y girándose para mirar a sus dos amigos—. Escuchadme, no sé qué cojones quiere ese cabrón, pero Ronnie no se lo pensará dos veces antes de pegarme un tiro.

— ¿Qué quieres que hagamos? —Thomas le mira.

—Ve a ese armario, saca la escopeta y el revólver —señala a la espalda del chico.