VEINTE

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Pov. Jimin


Estaba cansado, había salido temprano a recorrer Japón solo, era una maravilla de lugar, lo poco que había visto me había maravillado, regresé al hotel para encontrarme con Yoongi en la misma posición en la que estaba durmiendo cuando salí a recorrer, suspiré y fui a darme una ducha, cuando salí Yoongi estaba sentado en la cama jugando con su teléfono, lo lanzaba al aire y lo atrapaba.

—¿Piensas estar ahí echado todo el día?

—Te sentí salir temprano —Yo suspiré poniéndome una camiseta limpia —

—Salí a recorrer, es un lugar lindo, deberías acompañarme por la tarde —Dije revisando mi teléfono, Suga suspiró.

—Tengo una reunión ejecutiva con los inversionistas, luego una cena por la tarde, tenía la esperanza de que me acompañaras —Yo suspiré y me senté a su lado.

—Te acompañaré, pero... debemos hablar Yoongi —Dije tratando de tomar su mano, pero él se alejó levantándose rápidamente pero chocó con un mueble de la habitación y maldijo.

—¡Mierda! Odio esto! Odio estar ciego maldita sea! —Gritó con odio para luego sentarse en el piso, me acerqué a él y me di cuenta de que estaba llorando, como el día que despertó y no pudo ver, me puse de rodillas frente a él y lo abracé, él automáticamente se aferró a mí mientras lloraba y maldecía su ceguera.

—Está bien amor... —Susurré para tranquilizarlo, pero nada funcionaba.

—No está bien, esto no debería ser así! —Dijo alterado soltándose de mi abrazo, yo solo lo miré—. Se supone que yo debería sacarte a pasear por toda la ciudad, te llevaría a los lugares que me gustan, te ayudaría a conocer nada, pero estando ciego... ¿Por qué Jimin? ¿Por qué tengo que estar de esta forma? ¿es que jamás voy a recuperar la vista? ¿así será siempre? —Yo me mordí el labio, no había pensado en todo esto... mierda, debe sentirse tan mal.



—¿Estás más tranquilo? —Dije luego de casi una hora en silencio mientras nos manteníamos abrazados en el suelo de la habitación.

—Sí... bebé yo de verdad quería disfrutar este viaje contigo, pero sin poder ver será muy difícil —Yo suspiré rendido.

—Yoongi... podremos volver en otro momento

—¿Y qué pasa si no recupero nunca la vista? —Dijo bajando la cabeza, yo tomé su rostro y lo besé, no me gustaba este Min Yoongi deprimido y temeroso.

—Mi amor, haremos lo que esté a nuestro alcance para que recuperes la visión, no nos dejaremos vencer por esto tan rápido ¿bueno? —Min solo asintió mientras juntábamos nuestras frentes.



—Este restaurante es muy elegante ¿siempre te reúnes aquí? —Dije sonriendo ante la belleza clásica del lugar.

—Sí, muchos contratos importantes en trayectoria de la empresa de mi padre y lamía fueron firmados aquí, por eso sigo citando a mis clientes aquí, papá siempre me decía que le daba suerte y al parecer es cierto —dijo Suga, yo seguí a su representante hasta un lugar apartado y privado, donde dos gerentes japoneses importantes nos esperaban junto a sus jefes, tragué duro y con Min entramos, saludamos de forma cortés, el representante de Min tomó asiento a mi lado para ir traduciéndome todo lo que hablaban y así poder ser de más ayuda en todo.

—Es un gusto volver a verlos, joven Min, joven Park

—El gusto es nuestro, es un lugar muy lindo —Dije sonriendo, ellos después de que el representante les dijera lo que dije asintieron sonrientes, un joven vino a dejarnos una botella de vino y algunos aperitivos para luego retirarse rápidamente y de forma silenciosa, yo me sorprendí por eso, no es normal en los lugares que solía ir con Min.

Contigo siempre - myg/pjmDonde viven las historias. Descúbrelo ahora