SI TU ME MIRAS (TERMINADO)

Capitulo 6: Celos

Desayune temprano, Si Wan había venido por mi juntos iríamos hacer algunas vueltas pendiente que aun teníamos por la universidad. Me noto pensativa digamos que él me conocía como pocos.

-Estás muy callada hoy, algo no muy normal en ti ¿Qué te preocupa?

-Nada –Mentí

-Vamos Beca hasta ayer todo estaba bien –dijo- ¿Ese hermanastro tuyo tiene algo que ver?

-¡No! ¡Claro que no! –Niego vehementemente

-¿Segura?

-Segurísima, y no hablemos de ese tonto creído.

-Está bien –respondió él encogiéndose de hombros. Regrese a casa pasada las seis de la tarde, la verdad no quería verlo o si quería pero era mejor que no. Con suerte no estaba según lo que dijo mamá y a la hora de la cena tampoco lo vi, tal vez así era mejor, papá nos contó que estaba contratado por una empresa para diseñar unas obras y dado que parece que es un brillante arquitecto fue traído de Corea para el trabajo.

Y eso es lo que yo me pregunto, puede estar hospedado en cualquier hotel pero no, el muy cretino guapo decidió quedarse en nuestra casa. Salía todos los días siguientes con mi amigo Si Wan ante todos éramos solo amigos pero él cumplía casi con las mismas funciones de un novio aunque no lo éramos. Salíamos a reunirnos con amigos aprovechando las vacaciones antes de ir a la universidad.

Después de salir a bailar una noche Si Wan me llevo a casa un poco pasada las doce había estado algo cariñoso y yo creyendo que era la mejor manera de quitarme al odioso hermanastro de la cabeza no lo rechace en ningún momento, sé que estuvo mal porque es mi amigo y no quisiera jugar con sus sentimientos, pero si quiero quitarme este mal sentimiento debo ser egoísta por una vez.

Esa noche nos besamos varias veces y ahora que habíamos llegado a casa me beso dentro del coche de nuevo, sus besos eran dulces y hasta castos porque sentía que me amaba en cada beso y yo no podía corresponder como hubiera querido. De pronto y sin previo aviso la puerta del auto del lado en que yo estaba se abrió y unas manos me sacaron sin delicadeza alguna

-¿Qué haces? –proteste al ver quien era

-Lindo espectáculo haces delante de la casa de mi padre –dijo Jin Hyuk

-No estaba haciendo nada malo –proteste, Si Wan se bajó del otro lado y rodeo el auto hasta estar frente a nosotros.

-No la molestes -Dijo haciendo que Jin Hyuk me soltara

-Niño mejor ve a casa a dormir –le dijo y volteando a verme- Y tu entra a la casa que no son horas para que una mujer que se dice decente ande por fuera –Ah no eso si era mucha grosería y cuando estuve a punto de cachetearlo Si Wan se me adelanto y que le dio un golpe a Jin Hyuk en la cara, como es lógico no le hizo ni cosquillas, Jin Hyuk lo tomo por la pechera y casi que lo levanto del suelo. Si Wan parecía muñeco en sus manos- Agradece que tienes una cara de niña, porque si no ya te la hubiera desfigurado y ahora lárgate antes que me arrepienta y te de una paliza de la que no te levantaras en una semana –lo había llevado hasta su lado del auto , lo soltó bruscamente y regreso por mi tomo mi mano y me jalo dentro de la casa cerrando la puerta del jardín delantero.

Me fui quejando todo el camino pero para mi sorpresa no entramos a la casa por la puerta delantera sino por la parte de atrás que daba a la cocina.

-¡Suéltame! –gruñí de nuevo. Una vez estuvimos dentro, él lo hizo todo estaba a oscuras ya. Mis padres seguramente ya dormían- No se te ocurra volver hacer una idiotez como esta

-Grita más duro quizás así se despierten tus padres y vean la joyita que tienen de hija –lo cachetee fuerte en la oscuridad del lugar

-Deja de ofenderme que yo no he hecho nada malo

-Besarse con un tipo dentro del auto sin ser novios que es eso

-¡Que te importa! –empecé la huida a mi cuarto pero él me detuvo

-¿Acaso no eres mi hermana? Solo cuido tu honra hermanita –dijo lo último con sarcasmo

-¡Pues vete al diablo! Yo sé cuidarme solita –no estábamos gritando pero tampoco hablábamos bajito.

-Pues no lo parece cuando te dejas manosear de cualquier sujeto

-¡Imbécil! –le di una buena cachetada por su ofensa. Lo que paso después fue tan rápido que aún no logro entenderlo bien me aprisiono entre su cuerpo y el pilar de la cocina y sus labios golpearon los míos con fuerza. Intente separarlo pero era tan fuerte que no pude, manotee su pecho y él sujeto mis manos por encima de mi cabeza. Mi voluntad quedo rendida al cabo de pocos segundos, su beso era demandante y pasional. Me besaba como lo había soñado tantas veces.