Después de tanto bajar
una decide que ya va siendo hora
de empezar a subir,
y escalón a escalón
va dando tumbos
agarrándose a la única barandilla visible.
Que complicadas son estas cosas nuevas
estos rostros nuevos
que intentan escaparse
mientras que tú los quieres definir;
aunque quizás somos nosotros
los que escapamos de ellos.
