Vecinos (Cameron Dallas)

5

Mi hermano llegaría en un par de horas, me había avisado que su vuelo se había atrasado, la verdad me dio mas tiempo de poder terminar el pequeño desorden de ayer, no había vuelto a ordenar la ropa que había sacado. Me preguntaba que podía hacer para que mi hermano se sintiera mas cómodo, ya que mi apartamento era mil veces mas pequeño que su casa en Miami. Suspire e hice una ensalada que mi abuela solía hacernos cuando eramos pequeños y ella nos visitaba. Saque las zanahorias, las pasas y una piña, lave todo y puse a hervir las pasas, mientras tanto, comencé a rallar la zanahoria, las pasas no tardarían, termine de rallar la zanahoria y le apague la llama a las pasas, las escurri y luego las deje enfriar, pele la piña y luego la partí en trozos, tome un bol y metí todo y luego corte dos limones por la mitad y exprimí el jugo sobre la ensalada, le verti un poco de sal, tal y como lo hacia mi abuela. Mezcle bien y luego metí el bol al refrigerador, me senté en el sofá a esperar impaciente a mi hermano. La ansiedad me comía viva, me levante y tome mi guitarra, salí al balcón y sin perder ningún segundo comencé a tocar. Color de Halsey era la canción que me estaba calmando en ese momento. Suspire y alce mi vista al cielo, Porque mi hermano tardara tanto en llegar?

- Me parece que estas demasiado estresada - dijo Cameron.

- Lo estoy - dije sin mirarlo, el cielo tenia unas lindas nubes hoy.

- Que te tiene tan...

- Estresada - le respondí mientras bajaba la mirada de las nubes, el sonreía - Hoy vine alguien a visitarme - Su sonrisa se apago - Pero aun no ha llegado y me tiene preocupada.

- Alguien especial al parecer - dijo y yo asentí - Tu...

Pero en ese momento el sonido de la puerta lo interrumpió, salte de los nervios y mire a Cameron pidiéndole disculpas por la interrupción, el solo me dedico una sonrisa tranquilizadora y dijo: Ve. Me levante y fui corriendo, abrí la puerta y ahí se encontraba Derek, me lance a sus brazos riendo. El, me abrazo fuertemente.

- Te extraño mucho - le dije.

- Yo también te he extrañado muchísimo! - exclamo.

- Que tal Londres? - le pregunte mientras entraba y yo cerraba la puerta.

- Sabes? Es un lugar precioso, pero debo admitir que no están genial cuando estas solo - dijo dejando su maleta al lado del sofá - Es mas divertido cuando te tengo a mi lado, pequeño copo de nieve. - Me abrazo de nuevo, hacia mucho que nadie me llamaba Copo de Nieve, el siempre me llamaba así porque me teñí el cabello de blanco.

Recordé que Cameron estaba en el balcón, quería que conociera a mi hermano, ya que quería también la opinión de mi hermano, llamarme loca, pero mi hermano tiene un gusto tremendo cuando se trata de chicos.

- Ven, quiero presentarte a alguien - dije emocionada arrastrándolo al balcón.

Cuando salí, Cameron estaba por volver a entrar a su apartamento.

- Cameron! - le grite y el me miro y luego a mi hermano. - Cameron, ven - dije llamándolo, el se acerco de mala gana - Te quiero presentar a mi...

- Novio - me interrumpió y yo lo mire sorprendida, mi hermano comenzó a reír y Cameron solo nos miro confundidos.

- Hermano - complete y el se sonrojo.

Mi hermano seguía riendo mientras yo me mordía el labio, no puedo creer que el haya creído que mi hermano era mi novio, por poco y me desmayo, y eso que yo no era la que había hecho el ridículo.

- Perdón... es que yo...- se trababa y miraba hacia otro lado, evitando mi mirada.

- Hey! - dijo mi hermano - No hay problema - dijo sonriendo coqueto, NO PUEDE SER! - Creo que yo hubiera hecho lo mismo.

Cameron lo miro un poco confundido y se rasco la nuca para disimular su evidente nerviosismo, yo también lo haría, en especial ahora que se que mi hermano le esta coqueteando. Mire a mi hermano hecha una furia, sabia que le estaba coqueteando, lo conozco mejor que nadie, siempre que liga, sonríe coqueto y luego le invitaba a un café para luego llevarlo a alguna fiesta y emborracharlo y luego tirarse lo, lo ha hecho tantas veces, cuando viví un mes con el en Miami, el prácticamente llevaba a alguien diferente cada noche, la mayoría de veces eran chicas, pero cuando llevaba chicos, era un tremendo desastre, se cogían en toda la casa, una vez que llegue a casa tarde, porque acaba de salir de trabajar, entre a la casa y estaba hecha un desastre, los cojines del sofá tirados por todas partes algunos floreros rotos y los cuadros torcidos, un largo rastro de ropa masculina regada por todo el lugar, pensé que posiblemente estarían en su habitación así que para no molestarlos y no causar me un trauma decidí irme directo a mi habitación, lo cual resulto muchísimo peor de lo que había pensado, iba subiendo las escaleras, obviamente sus gemidos se escuchaban en toda la maldita casa, pero yo solo me concentraba en llegar a mi habitación y darme una ducha mientras escuchaba musica en lugar de sus asquerosos gemidos, pero no, mi lindo hermanito me tenia una bellísima sorpresa en mi habitación, abrí la puerta de mi habitación y me encontré a mi hermano penetrando a un chico por el culo en mi cama, EN MI HABITACIÓN! Recuerdo que grite asqueada y mi hermano me miro me sonrio y siguió como si nada, yo cerré la puerta de golpe y me fui a quedar a un hotel, no es que tenga nada en cotra de las relaciones homosexuales pero definitivamente ver a tu hermano coger, trauma a cualquiera. Mire a Cameron y sentí una punzada en el pecho, no definitivamente no dejaría que mi hermano se cogiera a Cameron, lo creo capas de entrar lo a mi apartamento y tirarse lo en mi cama. Retrocedí, mientras mi hermano estaba distraído mirando a Cameron, tome mi guitarra y me acerque lentamente a sus espaldas, pero luego pensé, esta muy cerca de la orilla si lo golpeo se cae y muere, así que mejor entre rápidamente a la cocina, llene un vaso de agua y regrese al balcón, encontré a mi hermano recostado en la barandilla sexymente, lo conocía bien.

- Quieres ir por un ca... - pero no pudo terminar, ya que le eche el vaso de agua fría en la cabeza.

- Hermano malo, hermano malo - le dije sonriendo malévolamente. - Cameron, te veré luego, primero le enseñaré modales a mi hermanito.

- Soy mayor que tu - dijo furioso. Le tome por la oreja y el se arrodillo chillando.

- Nos vemos luego Cameron - le sonrei y el me la devolvió con complicidad.

Movió sus labios sin hablar, diciéndome: Castigarlo bien. Yo asentí y arrastre a mi hermano adentro de mi apartamento.