Un regreso complicado

290 20 12
                                    

Por fin bajé de ese maldito avión, tantas escalas en diversos aeropuertos me dejaron agotada. Después de mas de dos años me decidí volver a esa ciudad donde dejé mi vida entera, extrañaba mucho el lugar y las personas que había dejado sin previo aviso. Fui por mis maletas y salí del aeropuerto rumbo a pedir un taxi cuando choqué con alguien a quien se le cayó la cartera desparramando su contenido por el suelo. Me agaché y comencé a juntar las cosas.

Yo - Lo siento, no me fijé por donde iba. - Levanté la vista hacia ella y quedé sorprendida al verla.

XxxX - No te preocupes, fui yo quien... - Dejó de juntar sus cosas en cuanto me vio - ¿Alice? - Sonreí diciéndole que si y ella me abrazó fuerte, pero al separarse recibí una bofetada de su parte. Me recordó mucho a la primera vez que vi a Armin en el instituto, aunque una reacción como esta era de esperarse proviniendo de Rosalya. 

Rosa - Donde diablos estuviste todo este tiempo! A quien se le ocurre irse de un día para el otro sin decir nada! Te crees que una nota alcanzaba!? Estas loca!? - Sus ojos comenzaron a cristalizarse producto de las lagrimas, la abracé nuevamente. - Te extrañé mucho idiota... - Me separé de ella y me puse de pie ofreciéndole la mano para que ella también se levantara. 

Yo - También te extrañé Rosita. - Sin dejar de sonreír junté sus cosas y le devolví la cartera.

Rosa - Tienes mucho que explicarme. 

Yo - Y demasiado que contarte. - Disminuí un poco mi sonrisa y suspiré. - Te invito un café, ¿tienes tiempo?

Rosa - Si tengo, pero iremos a mi casa, allí estaremos mas cómodas. - Paró un taxi. - ¿Sabes? Vivo con Leight! 

Yo - Me alegro, pero mejor vallamos a una cafetería. No creo que a Leight o Lysandro les agrade la idea de que valla. - Subimos al taxi y dio la dirección de su casa.

Rosa - No te preocupes por eso, a Leight le gustará verte y Lys se mudó a casa de Castiel. - Terminé por aceptar su propuesta. Al cabo de unos minutos ya estaba en el living de su casa con un Leight sorprendido frente a mi. Primero me miraba con sorpresa y sin entender pero al cabo de unos segundos me saludo muy alegre, mas de lo que esperaba a decir verdad. Nos sentamos a tomar un café y ponernos al tanto de nuestras vidas. 

Le - ¿Donde haz estado todos estos años?

Yo - Lo dices como si me hubiera ido un siglo.. - Me reí - Cuando me fui de aquí estuve unos meses viviendo en los ángeles, luego me mudé a Nueva York. 

Rosa - Nueva York! - Su intento de grito me hizo reír - Te fuiste sin mi a Nueva York! 

Yo - Eh tranquila! Que antes de venir te compre un regalo, luego te lo doy. - Pareció alegrarle mi respuesta.

Le - ¿Que hiciste allí? ¿De que viviste?

Yo - Cuando estuve en los ángeles trabajé como mesera y gracias a el dinero que me dio mi padre antes de irme pude alquilar un apartamento. A los cuatro meses estuve en condiciones como para mudarme a Nueva York y eso hice. Una vez instalada allí trabajé en una galería y comencé a estudiar. Cuando entre a la universidad viví en el campus y estuve en una banda como guitarrista y cantante. 

Le - ¿Una banda? Duro tan solo un año?

Yo - Que va! La banda ya existía antes de que yo llegara pero tuvieron problemas con la vocalista principal y ese año tenían muchos eventos que cubrir así que hicieron audiciones.

Le - Claro, te presentaste y quedaste sin problemas.

Yo - No, a decir verdad yo no audicioné como debía. Los chicos de la banda formaban parte del mismo campus al que yo iba, un día yo estaba cantando en mi habitación, ellos pasaron por allí y luego de unas preguntas me dijeron para tocar juntos. La hicimos, les gustó y me ofrecieron formar parte de su banda. Al comienzo me negué pero luego de aclarar ciertas cosas terminé aceptando. Hace unos meses sacamos un disco, luego se los presto.  

No confío en mi (2da parte)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora