Kitten; Ambreigns.

li; final.

El castaño entró a su hogar con un par de bolsas en mano y cantando una de las tantas canciones que escuchó en el trayecto a casa, le costó un poco de trabajo y varias maldiciones para lograr abrir la puerta sin embargo lo logró.

-¡Joe flojo ven y ayuda a tu bello esposo con las compras!-gritó el castaño, el moreno quien estaba en su habitación recostado bufó con demasiada pereza al bajarse de la cama, han pasados varios años, un hombre a sus cincuenta años no puede correr tan ligero cual pluma en cuanto escuche los melodiosos gritos de su pareja.-¡Joe, mueve ese obeso culo para acá!

-Ya basta Jonathan, no estoy sordo.-dijo el moreno casi a la mitad de las escaleras, su esposo le dedico una tierna sonrisa, de esas que hacen que sus regordetas mejillas se levanten y luzca tan adorable.-aunque tus gemidos ayer me han dejado un tanto sordo de este oído.

-¡Joe! deja de comentar eso como si nada, cerdo.-reprochó dando un leve golpe en el brazo del samoano.

-no hay nadie aquí mi amor, si quieres podemos repetirlo ahora.-se acercó seductora mente hacía su gatito, dando un pequeño mordisco en el lóbulo del castaño.

-aquí es donde ustedes tienen sexo y yo grabó ¿verdad?-mencionó Rollins en el marco de la puerta.

-¿cuánto tiempo llevas aquí?

-lo suficiente como para notar la erección que traes justo ahí.-dijo el ya no bicolor apuntando el pantalón del samoano.-¿no te cansas? es decir, llevan veinte años juntos y no hay un solo día que no vea al pobre de Jonathan caminando como pingüino, ya no hay respeto.

el castaño soltó una pequeña risa nerviosa para después besar la mejilla de su esposo y dirigirse a la cocina, el moreno bufó pues Colby siempre llegaba en los momentos más oportunos.

-como sea, ¿dónde esta Randall?-preguntó el castaño, más bien grito desde la cocina.

-en la oficina, dijo que debía arreglar unos asuntos sobre el nuevo talento.-contesto simple su amigo, encogiéndose de hombros con la mirada vagando en la pantalla de su celular.

-quien lo diría.-Lopez lo miró atento.- nuestro pequeño Sethie, el rey del #TeamVaginas resulto ser un miembro honorario del #TeamPene.-dijó el samoano haciendo reír a su esposo y sonrojando a su amigo.

-¡ay cierra la boca! si bien que te la mete Dean, porque si, él me ha contado.

-¡DEAN!

-¿Qué? tenía que contarle a alguien, además Ziggy es una chismosa y no puedo confiar.-el moreno comenzó a negar con la cabeza.-además tú sabes que ni Paige o Natalia tienen tiempo.

-¡Pero eso no te da el derecho de andarlo divulgando!-protestó el samoano elevando sus brazos bajo la lente del celular de Rollins.

-Pero si hasta me andabas pidiendo más.-mencionó el castaño sin poder evitar sonreír ante el recuerdo de las noches en las que Roman tímidamente le pide que se la meta, él comprende que no es sencillo para el moreno admitirlo pero ¡vamos! ¡le encanta que se la metan!

Su amigo soltó una fuerte carcajada al notar como el rostro del samoano se tornaba de un color rojo demasiado tierno pero demasiado extraño en él pues es muy bien conocido por ser el macho dominante.

-Dios, me alegró tanto de tener evidencia sobre esto.

-¡Colby! ¿estas grabando? ¿¡qué demonios!?-grito el moreno.

-El calvo que tengo como novio debe ver esto.-se encogió de hombros el antes bicolor.

-¡PASIVAS AL PODER!-el castaño chocó su palma con la de su amigo.-Romie tú has sido pasiva, choca esos cinco.

-¡Gatituuuuuu!