La Vida De Los Signos.

Capítulo 4

Narra Libra

Todos se fueron de la habitación, yo me quedé parado, cerré la puerta y el ruido que hize al hacerlo llamó la atención de Sagitario.

-¿Que haces?

-¿Que es lo que haces tú?

Me miró confundida

-Te ví llorando.

Se quedó congelada. La miré impaciente, había escuchado parte de su conversación con Géminis.

-¿Como...?

-¿Porque querías saber de que hablé con Leo?

Me molestó un poco que quisieta averiguar mi plática con Leo, más porque no había sido la mejor y terminé quedando en total ridículo.

Sagitario me quedó mirando. Esperé por su respuesta, pero ella solo bajó la mirada.

-Sigo esperando.

Susurró algo que no llegué a escuchar, le pregunté que había dicho. Dió un suspiro y levantó su mirada.

-Me gustas

No dije nada, definitivamente no me esperaba eso. Creo que hasta estaba molesto porque esa había sido una de las razones por las cuales Leo me rechazó. No sabía como sentirme.

Ella me observaba con atención, seguramente esperando a que dijera algo. Su mirada comenzó a cambiar, de pronto se volvió mas brillante y húmeda, parecía quere llorar.

Jamás la había visto así.

Ay, ay ¿Que hago, que hago?

Me senté a su lado, tomé su mejilla y la besé sin pensarlo.

No me interesaba en absoluto, no sentía nada por ella pero el remordimiento hacia Leo se apoderó de mi, necesitaba desquitarme de alguna manera.

Sentí como sus tibias manos atraparon mi cuello y sus labios se movían al compás de los míos.

A pesar de todo seguía con el corazón hecho trizas y nada de lo que hiciera podría arreglarlo. Leo jamás entendería el dolor que sentía y sus palabras aún retumbaban en mi mente.

-Sál conmigo -Susurré en su oído.

-¿Hablas enserio?

No lo sabía, no sentía mas que amistad por Sagitario y eso me angustiaba. ¿Por qué no podía sentir lo mismo que ella?
Comenzé a reflexionar y llegué a la conclusión de que tal vez con el tiempo pudiese sentir algo por ella, tal vez ella podía rearmarme.

-Si.

Me abrazó y me sobresalté, no me lo esperaba, pero la rodee con mis brazos también.

Tomé a Sagitario de la mano y caminamos hasta el living.

Se que no esta bien, pero quiero que nos vea.

Para mi suerte, Leo estaba ahí, junto con Aries y Tauro.

-Baia, baia.-Dijo Tauro pícaramente.

Aries y Leo nos voltearon a ver. Cruzé miradas con Leo, sonreí victoriosamente, pero esa sonrisa se borró al instante en el que sus ojos comenzaron a volverse cristalinos. Fue justo en ese momento que me dí cuenta que realmente no que sintiera lo mismo que yo.

¿Que hize?

Narra Tauro.

Quedé confundida.

No entiendo nada. ¿A Sagitario no le gustaba Géminis?

Siempre creí que ellos eran el uno para el otro, además de que pasaban mucho más tiempo juntos que cualquiera de el resto de nosotros. En mi opinión, esa pareja, habría sido todo un éxito.